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Javier Armenta conquista cuatro medallas y pone en alto a Culiacán y a México con su hazaña internacional

Javier Armenta Pérez reafirmó su talento y dedicación al conquistar múltiples preseas en el Campeonato Norte, Centroamericano y del Caribe de Atletismo Máster 2025, demostrando que la pasión por el deporte y el esfuerzo constante no tienen edad, y consolidándose como un referente del atletismo en la región

21 noviembre, 2025
Javier Armenta corre por él, por quienes lo apoyan y por todos quienes necesitan un recordatorio de que nunca es tarde para empezar de nuevo. Foto: Cortesía/TBN
Javier Armenta corre por él, por quienes lo apoyan y por todos quienes necesitan un recordatorio de que nunca es tarde para empezar de nuevo. Foto: Cortesía/TBN

Culiacán, Sinaloa.- En cada zancada, Javier Isaías Armenta Pérez recuerda que la vida siempre ofrece nuevas oportunidades. Tres veces venció al cáncer, superó un trasplante de médula ósea y, lejos de rendirse, eligió convertir cada batalla en impulso. Hoy corre más fuerte, más libre y con el corazón por delante, demostrando que los límites se desvanecen cuando la esperanza aprende a levantarse.

Javier entre pasos firmes y sueños cumplidos, demuestra que los milagros también usan tenis, sudan, respiran profundo y se levantan una y otra vez para seguir corriendo. Foto: Cortesía/TBN
Javier entre pasos firmes y sueños cumplidos, demuestra que los milagros también usan tenis, sudan, respiran profundo y se levantan una y otra vez para seguir corriendo. Foto: Cortesía/TBN

Javier Armenta: el corazón que aprendió a correr más fuerte que el cáncer

Esa fuerza interior volvió a iluminar la pista del Centro Deportivo Olímpico Mexicano (CDOM), donde Javier conquistó cuatro medallas en el Campeonato Norte, Centroamericano y del Caribe de Atletismo Máster 2025, un encuentro que reunió a los mejores atletas de 15 naciones.

Con cada una de estas pruebas, Javier no solo colgó preseas en su pecho, también levantó el nombre de Culiacán, Sinaloa y México, recordándole al mundo que la resiliencia puede tener la velocidad de un atleta y la luz de un campeón.

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“Fue una bonita experiencia, sabía que no iba a ser fácil por la altura de la CDMX, pero competir en un evento internacional en tu casa es algo motivante. Conocer y enfrentar atletas de toda la confederación hace que regresemos con más ganas de seguir mejorando”, compartió emocionado Javier después de su triunfo.


Y, como siempre, su corazón corre más rápido que sus pies: “Estas medallas van dedicadas a cada una de las personas que siempre confían en mí y me apoyan. Muchas gracias de corazón”, expresó con gratitud Armenta Pérez.

Javier nos demuestra que la vida se puede ganar una y otra vez, que el dolor puede convertirse en impulso y que los sueños, cuando se corren con fe y valentía, siempre encuentran la meta. Foto: Cortesía/TBN
Javier nos demuestra que la vida se puede ganar una y otra vez, que el dolor puede convertirse en impulso y que los sueños, cuando se corren con fe y valentía, siempre encuentran la meta. Foto: Cortesía/TBN

El pasado mes de agosto, Javier ya había demostrado su grandeza mundial al conquistar tres medallas, dos de oro y una de bronce, en los Juegos Mundiales de Trasplantados 2025 realizados en Dresden, Alemania. Allí se convirtió en uno de los diez mexicanos que hicieron brillar el nombre del país en esta justa deportiva.

La historia de Javier Armenta es más que una lista de medallas; es un recordatorio inspirador de que la vida se conquista paso a paso, aun cuando el camino parece imposible.

Armenta Pérez corrió desde la oscuridad hacia la luz, desde la enfermedad hacia la plenitud, y cada victoria en la pista es un abrazo para quienes aún luchan.

El triunfo de la fe y la valentía: Javier Armenta demuestra que no hay límites cuando el corazón corre. Foto: Cortesía/TBN
El triunfo de la fe y la valentía: Javier Armenta demuestra que no hay límites cuando el corazón corre. Foto: Cortesía/TBN

Javier no solo corre por marcas o puestos: corre por todos aquellos que necesitan creer que sí se puede. Su fuerza inspira, su ejemplo conmueve y su voz nos recuerda que cada amanecer trae una oportunidad nueva para empezar de nuevo.

Porque cuando un corazón se aferra a la esperanza y se niega a rendirse, ninguna meta queda lejos… y hasta lo imposible aprende a alcanzarse.


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