El mes pasado cerré un ciclo importante en mi vida: concluí mi Máster en Innovación y Emprendimiento de la Empresa Familiar en EUNCET Business School, Barcelona.
Por: Ildefonso Avilez
Fueron cinco días intensos, llenos de conversaciones profundas, debates, visitas empresariales y reflexiones que me cambiaron la manera de ver el liderazgo, la innovación y la vida misma.
Estos son los 10 aprendizajes que más me transformaron, no solo como emprendedor, sino como persona.
1. Los mejores líderes son los que dirigen menos.
Los dictadores controlan todo: empleados, procesos, sistemas. Los líderes inspiran para que la gente haga lo que debe hacer por iniciativa propia. Si tienes que controlar a tu gente, no lideras, supervisas.
2. No contrates ni retengas inútiles.
El verdadero liderazgo humanista es el que sabe distinguir entre humanismo y buenismo. No hay que confundirse. Un mal colaborador no solo resta, drena energía y bloquea el crecimiento de los que sí quieren avanzar.
3. Busca los patriotas de tu empresa.
Si en el vestuario del Barcelona hubiera alguien del Real Madrid, va para afuera. Aún y sea el mejor del equipo. Lo mismo para tu empresa. Punto.
4. Liderar es aprender a decir positivamente que “no”.
Los directivos y dueños que no saben decir “no” generan caos, dispersión y malos entendidos. Cada “no” bien dicho es un acto de enfoque y liderazgo.
5. La IA será capaz de llevar a la humanidad al siguiente nivel.
Lo mismo pasará con tu negocio, siempre y cuando, sepas usarla. Nunca antes fue tan barato acceder a capacidades intelectuales de este nivel.
6. Decidir con pocos datos e intuición es mejor que esperar certezas.
Más vale tomar decisiones con pocos datos y con mucha intuición, que esperarte a tener todos los datos para tomar la decisión.
7. Es mucho más importante la claridad estratégica, que la planeación estratégica.
Cuando tienes claridad absoluta de lo que quieres, atraes a las personas correctas.
8. No hay que ser un imbécil ni cuando subes ni cuando bajas.
Lo único que queda después de estar en la cima de la montaña es bajar. Tenemos que aprender a ver la montaña siempre desde abajo. No hay que confundir la ambición con ser imbécil.
9. Si le dedicas más tiempo y energía a los KPI’s que a tus clientes, estás perdido.
Es muy fácil caer en sofisticar nuestra empresa, hay que simplificar. Sofisticar lo hace cualquiera.
10. Las personas sin propósito son peligrosas.
La dirección general sirve para que las cosas sucedan. Y el liderazgo sirve para que las cosas sucedan con sentido.
¿Cuál de estos aprendizajes te hizo pensar más?