Cambio en la estructura social: clase media supera a la pobreza.
Por: Iván Aguilar
En un contexto regional desafiante, México ha logrado destacar con indicadores sociales y económicos positivos.
El más reciente informe del Banco Mundial, presentado en la conferencia mañanera el pasado 19 de diciembre, revela un dato significativo para el desarrollo del país: México se posiciona como la nación con mayor crecimiento de la clase media en toda América Latina.
Este análisis, basado en datos objetivos, muestra una tendencia clara hacia la movilidad social y la reducción de la vulnerabilidad económica en los hogares mexicanos.
Un Avance significativo en movilidad social
Los datos presentados indican una transformación importante en la estructura socioeconómica del país entre 2018 y 2024. Durante este periodo, la clase media en México experimentó un crecimiento del 12.4%, superando el desempeño de otras economías importantes de la región, como Brasil.
En términos prácticos, esto significa que aproximadamente 12 millones de personas han logrado mejorar sus ingresos, situándose en un nivel que les permite mayor estabilidad financiera.
El Banco Mundial clasifica en este segmento a quienes perciben ingresos superiores a los 17 dólares diarios (alrededor de 340 pesos), un umbral que sugiere capacidad para cubrir necesidades más allá de las básicas.
El cambio en la estructura social: Mayoría en clase media
Uno de los hallazgos más relevantes del informe es el cambio en la proporción de los grupos socioeconómicos. Las estadísticas muestran un cruce histórico en las tendencias: Actualmente, el porcentaje de la población en clase media (39.6%) supera al porcentaje de personas en situación de pobreza (21.7%).
Este dato contrasta con la situación de 2018, cuando la proporción de personas en pobreza era mayor. La inversión de estas cifras sugiere que las políticas económicas y sociales recientes han facilitado que un sector amplio de la población transite hacia condiciones de vida más seguras y menos vulnerables.
Impacto económico: Un círculo virtuoso
El fortalecimiento de la clase media tiene implicaciones que van más allá del bienestar individual de las familias; genera efectos positivos en la economía nacional en su conjunto. Analistas y expertos coinciden en que este fenómeno impulsa un "círculo virtuoso":
- Aumento del consumo interno: Al tener mayores ingresos, las familias incrementan su demanda de bienes y servicios, lo que dinamiza el comercio.
- Fortalecimiento empresarial: El aumento en la demanda beneficia a las empresas, que reportan mejores resultados.
- Estabilidad financiera: Un mercado interno robusto favorece tanto al sector bancario como a las pequeñas y medianas empresas.
La coincidencia entre las cifras del INEGI y las del Banco Mundial refuerza la validez de estos datos, confirmando una tendencia de recuperación y crecimiento sostenido en el bienestar de los hogares.
Perspectivas de estabilidad y bienestar
Más allá de las cifras, este crecimiento de la clase media representa una mayor estabilidad para el país. Significa que más familias cuentan ahora con recursos para invertir en educación, salud y vivienda, reduciendo su dependencia de programas de asistencia y aumentando su autonomía económica.
La evidencia muestra que México avanza en la dirección correcta en términos de reducción de desigualdades, sentando bases más firmes para el desarrollo futuro.