Niñas y niños del plantel educativo que se ubica en la colonia Ampliación Lázaro Cárdenas conquistan el primer lugar en Juguemos a Emprender Culiacán 2025 con bolsas ecológicas hechas de plástico reciclado
Por: Juan Madrigal
Culiacán, Sinaloa.- Con ingenio, conciencia ambiental y un gran corazón colaborativo, cuatro estudiantes de quinto grado “A” de la Escuela Primaria Niños Héroes, ubicada en la colonia Ampliación Lázaro Cárdenas, demostraron que las grandes ideas no tienen edad.
En un mundo que necesita soluciones urgentes y creativas, ellos decidieron tomar acción: convirtieron la basura en moda y su proyecto escolar en una causa con impacto social.
Su empresa Plastiqué, formada con pasión, reciclaje y trabajo en equipo, conquistó el primer lugar del concurso Juguemos a Emprender Culiacán 2025, organizado por Proeduca Sinaloa IAP en su edición número 18, dejando claro que los sueños grandes también nacen en las aulas de primaria.
Estudiantes crean bolsas ecológicas y ganan primer lugar con Plastiqué en Juguemos a Emprender Culiacán 2025
Suleidy Janahi Meza Esparza, Janybeth Guadalupe Peña Medrano, José Miguel Armenta Martínez y Gilberto Rodolfo Arredondo Altamirano integran el equipo “Plastiqué”, una empresa que logró impresionar a un jurado conformado por reconocidos empresarios sinaloenses como:
- Luis Osuna Vidaurri (Grupo Panamá)
- Germán del Rincón Camacho (Grupo del Rincón)
- Alberto Torrero Tolosa (Helados del Pueblo), gracias a su innovadora propuesta de bolsas ecológicas hechas a partir de plástico reciclado.
Durante más de tres meses, las niñas y niños emprendedores trabajaron intensamente para desarrollar, producir y presentar su producto: PlastiBags, una línea de bolsas resistentes, coloridas y únicas, elaboradas a partir de capas de bolsas de plástico fusionadas con calor y convertidas en artículos útiles para el día a día.
Cada integrante del equipo asumió un rol específico dirección (Suleidy), gerencia (José Miguel), producción (Janybeth) y control de calidad (Gilberto) y juntos lograron organizar una verdadera empresa.
“¿Sabías que cada día millones de bolsas de plástico contaminan nuestro planeta?”, fue la pregunta con la que Suleidy inició la presentación. Y agregó con entusiasmo: “Nosotros tuvimos la grandiosa idea para ayudar a cuidar al medio ambiente mientras aprendemos, emprendemos y reciclamos”.
El proyecto no solo destacó por su originalidad, sino también por su impacto comunitario. Tal como explicó José Miguel, todo el alumnado de la escuela participó recolectando bolsas en casa y llevándolas a la escuela: “¡Fue un trabajo en equipo de toda la comunidad escolar!”.
Janybeth detalló el proceso de fabricación: limpieza, clasificación, fusión con calor, diseño, costura y ensamblado. Las asas también se elaboran con plástico reciclado y las bolsas incluyen velcro como cierre.
“Cada bolsa es única. Ninguna es igual a otra. Es una forma divertida, creativa y útil de transformar basura en un producto ecológico con valor”, explicó la jefa de producción.
Desde su papel como jefe de control de calidad, Gilberto presentó los costos de producción: 22 pesos por bolsa, con un precio de venta de 50 pesos, lo que genera una ganancia de 28 pesos por unidad. “¡Con cada compra ayudas al planeta y apoyas el talento de estudiantes emprendedores como nosotros!”.
El jurado quedó impresionado. Luis Osuna reconoció la textura y calidad del producto, y destacó el conocimiento integral del equipo sobre su proceso y propuesta.
“Los felicito porque es una muy buena iniciativa con mucha creatividad, y sobre todo con un gran impacto social, que es el cuidado del medio ambiente”, expresó Osuna Vidaurri.
Los ganadores expresaron un sincero agradecimiento y dedicaron su triunfo a sus familias, en especial a sus padres, por el respaldo incondicional que les brindaron en cada etapa del proyecto.
Reconocieron también el acompañamiento del director del plantel, Irving Asbel Armenta Gastélum; el apoyo y motivación constante de su maestra, Diana Celeste Ramírez García; y la orientación de la facilitadora de Proeduca, Janeth Sánchez.
También agradecieron a las y los estudiantes de su escuela que, con entusiasmo, participaron en la recolección de bolsas. Su colaboración demostró que cuando una comunidad se une con un propósito, se multiplican los esfuerzos y nacen historias de éxito compartido..
“Donde muchos ven basura, nosotros vemos una oportunidad para cuidar el planeta y generar valor”, afirmaron con orgullo, el equipo de Plastiqué.
El director del plantel celebró el triunfo como resultado del esfuerzo en equipo: “Este primer lugar es resultado del trabajo conjunto de estudiantes, docentes, madres, padres y la dirección. Sin duda, motivará a más niñas y niños a participar en este tipo de iniciativas”.
Más allá del primer lugar, el equipo de Plastiqué vivieron una vivencia que transformó su manera de ver el mundo y su papel dentro de él.
Aprendieron que cuando el talento se une al compromiso y al esfuerzo colectivo, todo es posible. Porque cuando una idea nace desde el corazón y se construye en comunidad, no solo se recicla plástico… también se recicla esperanza.
“Vivimos una bonita experiencia que jamás olvidaremos”, expresaron con una sonrisa llena de orgullo los integrantes de Plastiqué. “Descubrimos que cada esfuerzo cuenta y que, cuando se trabaja con el corazón y en equipo, no hay límites para lo que se puede lograr”.
Con la convicción que solo nace de haber construido algo propio, compartieron un mensaje para todos los niños y niñas: “Nunca dejen de soñar. Sigan lo que más les apasione, porque ahí es donde nacen las grandes ideas que pueden cambiar el mundo”.
Suleidy, Janybeth, José Miguel y Gilberto concluyeron con la frase que ya se ha convertido en su credo: “Porque en Plastiqué… ¡aprendemos, emprendemos y transformamos basura en moda!”.
Una lección valiosa que nos recuerda que los sueños, cuando se cultivan con esfuerzo y se guían por un propósito, se convierten en acciones que inspiran y construyen un futuro más próspero.