Culiacán se llena de magia, los vecinos de Barrancos iluminan sus casas y reavivan el espíritu navideño
Las familias del sector Barrancos se unen casa por casa, para llenar sus calles de luces, creatividad y tradición.
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El espíritu navideño llegó con fuerza a Barrancos. Este año, más que nunca, los vecinos decidieron darle vida a sus calles colocando luces multicolor, inflables gigantes, figuras de Santa Claus, renos, muñecos de nieve, soldaditos de plomo y ángeles que brillan cada noche.
El resultado: una colonia iluminada que se volvió motivo de orgullo para todos.
Las casas, adornadas con creatividad y dedicación, se han convertido en un recorrido obligado para quienes viven en el sector. Muchas fachadas lucen extensiones que dibujan cortinas luminosas, otras tienen escenas completas del nacimiento, y algunas más parecen pequeñas villas navideñas hechas en casa.
La señora Elizabeth Sauceda, una de las vecinas que desde hace años decora su fachada, comparte con una sonrisa: “Lo hacemos porque nos gusta ver felices a los niños… uno se emociona nada más con verlos brincar cuando pasan y dicen ‘¡mira, mira!’”, comparte para Tus Buenas Noticias.
La comunidad se une para embellecer sus calles
Un poco más adelante, don Rafael Beltrán, quien instaló más de cuatro tiras de luces en la azotea, explica su motivación: “Barrancos también sabe brillar. Ya estuvo bueno de que digan que aquí no se hacen cosas bonitas. Nosotros ponemos nuestro granito de arena”, dice.
Lo que comenzó con un par de casas adornadas ahora es una iniciativa espontánea que envuelve a todo el sector. Cada noche, familias enteras salen a caminar para ver las decoraciones, tomarse fotos y sentir el ambiente navideño sin tener que salir de la colonia.
Testimonios de vecinos que reavivan el espíritu navideño
“Se siente bonito, la verdad. Te da orgullo decir ‘soy de Barrancos’ cuando ves cómo se organizan los vecinos para que luzca así”, comenta Karla González, una joven que ayudó a su papá a colocar inflables y luces este fin de semana.
Entre luces, risas, música y decoraciones hechas con el corazón, Barrancos logró algo más grande que embellecer sus calles: fortaleció su identidad, su sentido de unión y su orgullo de pertenecer a un sector que también sabe celebrar lo bonito.
