Deterioro ambiental y rehabilitación de ecosistemas
El deterioro ambiental, o degradación ambiental, es el empobrecimiento o la destrucción del medio ambiente a raíz del agotamiento de sus recursos naturales y de la introducción de cambios o alteraciones en su constitución física y química, toda consecuencia de las actividades industriales y el modo de vida del ser humano.
El problema con el deterioro ambiental es que además de que afecta a toda la biodiversidad de nuestro planeta, afecta también a los seres humanos con diferentes complicaciones las cuales pueden ser falta de alimento, falta de agua, extinción de especies, contaminación, enfermedades, entre muchas otras.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alrededor de 1.600 millones de personas dependen de los bosques para su sustento, incluidos 70 millones de personas indígenas.
También comenta la ONU que nuestra salud estará cada vez más amenazada si no se toman medidas urgentes para frenar y reparar los graves daños causados al medio ambiente. La contaminación del agua, del aire y los desechos químicos amenazan la integridad de los seres humanos y hasta su capacidad para reproducirse.
Si no se aumentan drásticamente las protecciones ambientales se producirán millones de muertes prematuras a mediados de siglo en diferentes lugares del mundo.
Por ejemplo, la resistencia antimicrobiana se convertirá en una de las principales causas de muerte debido a la contaminación de los cuerpos de agua, y los disruptores endocrinos, productos químicos que alteran el equilibrio hormonal de los humanos, afectarán la fertilidad masculina y femenina, así como el desarrollo neurológico infantil.
La Organización de los Estados Americanos comenta que la restauración ecológica busca plantear y utilizar estrategias y técnicas que posibiliten el restablecimiento de las áreas afectadas por causa de diferentes disturbios tanto antrópicos como naturales.
Esta ciencia ambiental innovadora que recupera ecosistemas degradados podría mitigar la pérdida de la biodiversidad global, además de promover la recuperación de los servicios ecosistémicos, tales como la mejora de la calidad del agua y el almacenamiento del carbono.
La restauración o rehabilitación de ecosistemas es una de las herramientas que podemos implementar para rescatar ecosistemas deteriorados o que han sido afectados de diferentes formas, si comenzamos a trabajar con esto podría garantizar un mejor futuro para la biodiversidad y para los seres humanos.
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