Esperanza, amor y victoria: Isabella y Abril ganan la batalla contra el cáncer
En medio de lágrimas, abrazos y sonrisas, las dos guerreras celebraron en el Hospital Pediátrico de Sinaloa (HPS) al tocar la campana que simboliza su triunfo tras vencer el cáncer


Culiacán, Sinaloa.- En el Hospital Pediátrico de Sinaloa (HPS), el sonido de la campana de la vida resonó con fuerza y esperanza. La niña Isabella Avendaño Medina y la joven Abril Nolasco Silva celebraron el final de su tratamiento contra el cáncer, un momento que simboliza no solo la victoria sobre la enfermedad, sino también la fuerza del amor, el acompañamiento y la fe que las sostuvo en el camino.
Campana de la vida suena en el HPS: Isabella y Abril vencen al cáncer
Entre lágrimas y sonrisas, Janet Citlaly Medina Soto, mamá de Isabella, confesó que era un día de sentimientos encontrados:
"Muy contenta, nos sentimos victoriosos porque vencimos una enfermedad que en el camino nos hizo despedir a muchos niños. Fue una lucha fuerte, pero seguimos aquí, y ahora lo que sigue es ayudar a otras familias. Todavía quedan cinco años de vigilancia, consultas, cuidados y estudios para evitar que esto regrese, pero hoy celebramos que mi hija está de pie."
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Isabella estuvo rodeada de su familia, amigos y del equipo médico que la acompañó en cada etapa, en especial su doctora Daniela Arce Cabreras.
Por su parte, Abril Nolasco Silva, diagnosticada con leucemia a los 17 años y después de cuatro años de tratamiento, compartió con profunda emoción:
"Este día tiene un significado muy grande porque fue un proceso muy difícil para mí y para todas las personas que estuvieron a mi lado. Gracias a Dios, aquí estoy. Quiero agradecer desde lo más profundo de mi corazón a todos los que fueron parte de mi sanación… y a la Fundación GANAC, gracias, por tanto: por el apoyo emocional, económico y humano, por no soltarme la mano cuando más lo necesitaba."
Con amor, fe y acompañamiento, Isabella y Abril celebran la victoria más importante: la vida
Abril vivió este momento acompañado por sus padres, su hermanita y su doctor Jorge Luis Guzmán, recordando que cada campanada es un mensaje de esperanza para quienes aún luchan.

Hoy, Isabella y Abril nos recuerdan que el cáncer existe, pero también que tiene cura. Su victoria es un llamado a seguir apoyando la detección oportuna, el tratamiento y la investigación del cáncer infantil.