¿Tamales con hoja de plátano en San Ignacio, Sinaloa? Luz María los hace como en su natal Chiapas
Luz María llegó desde Chiapas a San Ignacio con una receta en el corazón: tamales envueltos en hoja de plátano, hechos con amor, maíz molido a mano y cocidos con leña, como dicta su tierra


San Ignacio, Sinaloa.- Los tamales envueltos en hoja de plátano, son comunes en algunos estados sureños de México, como Oaxaca, de ahí que se conozcan como “oaxaqueños”, aunque también en Chiapas se ha convertido en un alimento típico.
Esta delicia gastronómica sureña es famosa por su rica variedad de sabores y texturas, algunos de los más populares son; de mole negro, mole verde y rajas, aunque también pueden ser dulces.
Una chiapaneca que lleva el sabor del sur a Sinaloa
¡Recibe las últimas noticias!
La señora Luz María Pérez García, originaria de Villa Flores, Chiapas, desde hace año y medio, se dedica a la venta de tamales en hoja de plátano, en San Ignacio, Sinaloa, tratando de conservar la receta y el sabor de su tierra.

Ella llegó a este municipio motivada por uno de sus hijos que desde hace varios años reside en la cabecera municipal, quien la convenció luego de ver como es que trabajaba demasiado en laelaboración y venta de tamales, y que obtenía una mínima ganancia, debido a que en ese lugar cuando mucho una pieza cuesta diez pesos, añadiendo que en un solo día, llegó a hacer mil 500 tamales, a los que en total invertía tres días, contando el proceso de cortar la hoja y preparar todos los ingredientes.

El proceso artesanal detrás de cada tamal
Fue al poco tiempo de llegar, que se decidió a comenzar con la venta en San Ignacio, donde dice ha tenido muy buena aceptación.
Aunque parezca sencillo, la hoja tiene su proceso, pues no solo es cortarla, pues después de esto, la asa en un comal, la lava con una esponja y jabón, la corta en cuadros y le quita el tallo que une la hoja, pues de lo contrario si se deja, el cliente podría llegar a pensar que se trata de un cabello.

Tamales hechos a mano, desde la masa hasta la leña
Otra de las características particular de sus tamales, es que el maíz para preparar la masa, ella misma lo cuece y muele con molino de mano, lo que le da una consistencia única, añadiendo que esta no lleva harina de maíz industrializada.
Su preparación es fácil dijo, pues estos los hace en el transcurso de la noche, y los cuece en la madrugada, para lo que utiliza leña, algo que le da un sabor especial, estos duran entre una hora y media a dos horas al fuego, por lo que las personas ya pueden estar deleitándoselos para la hora del desayuno.

Algo que si se le dificulta, es conseguir la hoja, pues esta escasea en San Ignacio, por lo que en ocasiones se la envían de Mazatlán, pero esta viene desde el estado de Veracruz, por eso a veces los tiene que preparar con hoja de maíz, aunque aclaró que los clientes prefieren el de hoja de plátano, por lo que busca siempre asegurarlos a ellos primero, ya que hay personas que les da igual que sean de cualquier hoja.
Al principio indicó, hizo algunos para una reunión de familiares de su nuera, y estos quedaron muy contentos con el sabor, por lo que cuando hizo para vender, ellos fueron sus primeros clientes y así estos fueron recomendándolos, además de que en la cabecera hay mucha gente del sur, quienes ya lo conocen y lo compran sin dudar, sin deja de lado las redes sociales que le han servido mucho para promocionarse.

En un inicio hacía entre noventa y 120 piezas, pero de hoja de maíz, después comenzó a hacer de hoja de plátano, y la gente se comenzó a acostumbrar, por lo que al no poder conseguir la hoja, bajó la producción, lo que la llevó a crear una estrategia, de ofrecer al cliente la opción de llevar de los dos, a lo que estos han venido accediendo.
Además, explicó que la mayoría de las veces hace tamales de costillita de puerco con chile colorado, de carne con mole verde y en ocasiones de rajas de chile poblano, pero los más pedidos son los primeros.
Así mismo, señaló que en ocasiones se instala en las afueras de una tienda comercial, pero en ocasiones no ha sido necesario, ya que las personas comienzan a hacer pedidos y solo se dedica a entregar a domicilio, la pieza cuesta 25 pesos, sin ningún costo extra a domicilio.
Tepache, pozol y otros sabores del sur que quiere compartir
También ha puesto a la venta el rico tepache, bebida preparada a base de cáscaras de piña fermentada, teniendo como inquietud innovar con otra bebida típica de su tierra llamada pozol, una bebida a base de maíz y cacao, muy popular en su estado y otros más del sureste de México, su consumo es muy común entre las personas que salen a trabajar al campo, por ser una bebida refrescante y nutritiva.
Así es como se ha convertido en la encargada de deleitar el paladar de los sanignacenses con esta delicia culinaria, donde aparte de que la hoja de plátano darle una vista antojable, aporta un sabor y aroma únicos a los tamales, además que también ayuda a mantener su humedad y textura.