Reyna Mircell, niña de El Fuerte vence el cáncer y nos muestra agradecida la ruta de esperanza

Culiacán, Sinaloa.- Una guerrea de vida. A sus 10 años, Reyna Mircell Castro Ayala, logró vencer la batalla del cáncer que por casi tres años tuvo que lidiar aún con los peores pronósticos, pero el amor la disciplina y la fe, la volvieron una inspiración y ejemplo de un inquebrantable deseo de vivir.

La pequeña originaria del municipio de El Fuerte, tras diagnosticarle la terrible enfermedad en abril del 2020, Casa Valentina, (Fundación que apoya a niños con cáncer, ubicada en Culiacán), se convirtió en su segundo hogar. Pues según nos cuentan, después de más de tres años de lucha y más de 100 quimioterapias, y gracias al “todo poderoso” y personas de gran corazón que jamás la dejaron sola, en este difícil proceso, el pasado 23 de marzo Reinita logra tocar la “campana de la vida”, en el Hospital Pediátrico de Sinaloa (HPS).

Para la pequeña Reyna Mircell Castro, salir de esta enfermedad es volver a vivir. “Estoy muy contenta de lograr dar las campanadas porque terminé mi tratamiento contra el cáncer con resultados positivos, que fue durante más de dos años. Nunca perdí la fe ganar la batalla”, expresó la hermosa pequeña, que sueña de grande en ser enfermera para cuidar a niños con cáncer.

Miriam Cecilia Ayala González, mamá de Reyna Mircell, narra que acudió con su hija al Hospital del IMSS en El Fuerte, en abril de 2020, debido a que padecía, algunos síntomas como dolor de piernas.

“Mi niña empezó a sentir dolor en las piernas, le cambio su tono de piel, le hicieron análisis y estaba baja en hemoglobina, y tenía sus plaquetas descontroladas. Entonces la internaron en el IMSS de El Fuerte, pero como era en el tiempo de la pandemia, estuvo 15 días internada. Entonces me mandaron con el médico hematólogo, quien fue que me recomendó que no perdiera tiempo, porque probablemente Reinita padecía cáncer”, expresa Ayala González.

“Dios nunca nos deja solos. Reinita estuvo sus primeros seis meses. Sin poder ir a su casita. Ya después pudo ir y nos siguen recibiendo mes tras mes en Casa Valentina. Estoy eternamente agradecida con la señora Ely y Maricela. Casa Valentina fue su segundo hogar para mi niña, quien siempre se sintió muy querida y abrigada. Siempre nos ayudaron con insumos médicos, hospedaje, pasaje, traslado al hospital y una infinidad de apoyo. Muchísimas gracias a todas las personas que nos han apoyado siempre. Dios me los bendiga siempre”, manifiesta la mamá agradecida.

Recuerda la madre que luego de distintos estudios realizados en HPS y la consulta con especialistas, se confirmó el diagnóstico de leucemia linfoblástica aguda, un tipo de cáncer en el que la médula ósea produce un exceso de glóbulos blancos y deteriora con rapidez la salud de la persona afectada, por lo que su hija de inmediato inició con el tratamiento.

Para Miriam Cecilia enfrentar la enfermedad que padecía su hija no fue nada fácil, pasó por momentos muy difíciles y dolorosos, pero señala que no tiene palabras para agradecer a cada una de las personas que apoyaron para lograr que su niña luego de casi tres años en los últimos estudios que se le realizaron no se encontraron células cancerígenas en su organismo y por este motivo fue dada de alta de su tratamiento.

“Fue muy duro enfrentar el padecimiento de mi niña, porque ya no cuento con mis papás, perdí a mi esposo, soy madre soltera. También me fue muy difícil dejar a mis otros hijos en El Fuerte. Antes de la enfermedad de mi niña tuve a mi mamá con cáncer de mama, la acababa de perder a ella y a los dos meses fue lo de Reynita”, comenta consternada la valiente mujer.

La vecina del municipio de El Fuerte, asegura que Dios le dio muchas fuerzas para salir adelante. “Se sufre mucho, más cuando se trata de la salud de un hijo. Verlos sufrir que pasan por tanto dolor. Gracias a Dios, nunca perdí la fe y la posibilidad de sacar fuerzas, para lograr salir adelante. Además, me ayudó mucho que mi niña siempre fue muy positiva y siempre le echo muchísimas granas. Siempre trató de llevar una vida normal como cualquier niño o niña”, dijo.

La madre de Reynita, indica que su hija continuará bajo el cuidado de médicos especialistas durante cinco años más, con la finalidad de vigilar que el tratamiento médico siga teniendo un efecto positivo.

La prevención es una parte muy importante de solucionar el problema del cáncer. Miriam invita a los padres a estar muy atentos a sus niños, qué si presentan síntomas como dolor de piernas, altas temperaturas, falta de apetito, moretes en la piel, acudir de inmediato al médico, para lograr ser atendidos de inmediato y puedan salvar sus vidas como lo fue su niña. “Gracias a Dios llegamos a tiempo, recibió sus quimios a tiempo con el apoyo de muchos ángeles. Seguirá en vigilancia, y espero en Dios que en cinco años este, libre de todo”, expresa con gran deseo Miriam.

Y con ese agradecimiento del alma exhorta a los padres a nunca perder la fe, porque en el hospital Pediátrico existe excelente personal médico, un ejemplo es el Dr. Jorge Guzmán, quien siempre estuvo al pendiente de su hija, la cobijó con sus atenciones y conocimientos médicos, dice.

Reynita manifiesta que durante su proceso no todo fue desagradable, también tuvo momentos muy especiales, como el conocer muchas personas de gran corazón, a su amiga Melany que tuvo la oportunidad de convivir con ella en Casa Valentina. Además, conocer celebridades de las redes sociales, como Markitos y Pilototo Toy. En especial disfrutó mucho convivir con su youtuber favorita, Griselda Verduzco, mejor conocida como “Mis Pastelitos”.

“Me fascina todo lo que hace “Mis Pastelitos” porque me gusta mucho la repostería, soy muy dulcera (risas). La conocí en diciembre del año pasado en la Posada de Casa Valentina, nos regaló unas galletitas de jengibre. Nos abrazó y nos tomamos, fotos”, manifiesta muy emocionada la guerrera de vida.

Reynita y Miriam aseguran que el cáncer les enseñó a no guardar cosas para una ocasión especial, porque todos los días son especiales. Aseguran que el cáncer es una enfermedad angustiosa, desgastante, que requiere de toda la voluntad y mucha energía de quien la padece. Mantener el buen ánimo es uno de los mejores tratamientos para lograr combatirlo.

El cáncer pudo afectar todas las habilidades físicas de Reynita, pero jamás logro tocar su mente, corazón y alma. Hoy tras la campanada de salida es otra… ¡Disfruta de la vida al máximo!

Carta de agradecimiento de una guerrera de vida

Reynita agradece de todo corazón a todas las personas que la ayudaron a salir con resultados positivos en su tratamiento de la lucha contra el Cáncer.

“Gracias a mi Dios santísimo y su infinita misericordia y a cada una de las personas que tuvieron siempre a mi niña en sus oraciones, a personas conocidas y desconocidas que pusieron su granito de arena, Dios les bendiga y multiplique siempre. Amén”, manifiesta la madre de Reyna Mircell.

Agradece también a la expresidenta del Fuerte, Nubia Ramos Carbajal y a expresidenta del DIF Municipal, Josefina Carvajal, Ilxe Amelia Acosta y Omar Jiménez. También al actual presidente de El Fuerte, Gildardo Leyva y a la presidenta de DIF Municipal, Laura Ledezma.

A la Sra. “Pachelli” y todo su equipo de Fundación Ganac.
A la Sra. Elizabeth Rojo y Maricela Barraza, de Fundación Casa Valentina para niños con cáncer.
Dorita García de Enlace de Ayuda.
A la Sra. Janeth Zazueta de Iribe.
A la Sra. Marlha Astorga de la fundación Yo con Marlha de Corazón.
A la Sra. Graciela Cueto, de la fundación Amor Mágico AC.
A la Sra. Aydee de la Fundación José eres mi Ángel.
El Sr. Emanuel y la Sra. Elvia de Cadena de ayuda CLN.
Petunia Rivera y Soledad Yañez de Fundación de Ayuda Gente Sin Fronteras.
Jorge Peralta, de la Fundación Ángeles Nocturnos.
A Sr. Emanuel y Sra. Elvia de Cadena de ayuda CLN.
Al Sr. Jesús Avilés.

Sr. Rene Guerrero Chiquete, Monserrat Omaett, Saida Arellanes, Victor Nojorquez, Juan de Dios Ríos, Lucero Enríquez Yáñez, a José Ricardo Castro Rocha “Chino piloto” y su esposa Mariela. Paty Sotelo, Markitos Toys, Pilotito Toys, Enrique Medina y Rosalvina Gutiérrez.

En especial un merecido reconocimiento al Dr. Oncólogo Jorge Guzmán y a las enfermeras y personal que trabaja en el Hospital Pediátrico de Sinaloa, quienes fueron una pieza fundamental muy importante en la recuperación de Reynita.

A todas las personas que han formado parte en nuestras vidas y nos han dado su apoyo incondicional, no podemos decir nada más que ¡GRACIAS!”.

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