La marca de autos chinos SEV se va de México: ¿qué pasará con quienes compraron uno de sus vehículos?

La marca de autos chinos SEV, que ganó popularidad por ofrecer el auto eléctrico más barato de México, sorprendió con su salida del país, dejando dudas entre muchos usuarios que compraron sus vehículos

Por: Raúl Durán

La salida de SEV (Solarever Electric Vehicles) del mercado mexicano tomó por sorpresa a clientes y especialistas del sector automotriz. Sin comunicados oficiales ni un plan de cierre anunciado, la marca de autos chinos que se hizo conocida por ofrecer el auto eléctrico más barato en México dejó de operar en el país, generando dudas entre quienes ya habían comprado uno de sus modelos.

SEV llegó con una propuesta atractiva: impulsar la electromovilidad con precios accesibles. Bajo la distribución de la empresa mexicana Solarever, la marca comercializó modelos eléctricos como E-Nat, E-Tus y Friday, con precios que rondaban desde los 300 mil pesos.

Su bajo costo y la promesa de una infraestructura sólida despertaron el interés de muchos compradores que buscaban dar el salto al auto eléctrico.

Sin embargo, el cierre repentino de sus agencias y la falta de atención a clientes encendieron las alertas. Para los propietarios, la principal preocupación es qué pasará con el servicio postventa

SEV llamó la atención al poco tiempo de su llegada a México por ofrecer el auto eléctrico más barato. Foto: Cortesía

¿Qué pasará con quienes compraron un auto de SEV?

Al no haber ya una red activa de la marca, conseguir mantenimiento especializado, refacciones o actualizaciones técnicas se vuelve complicado. En muchos casos, los dueños deberán recurrir a talleres independientes o buscar piezas por su cuenta, lo que puede elevar costos y tiempos de reparación.

Otro punto delicado tiene que ver con los trámites. Algunos propietarios han señalado dificultades para obtener documentos necesarios para gestiones ante autoridades de movilidad, como comprobantes técnicos o cartas requeridas para ciertos beneficios de autos eléctricos. Al no existir una oficina operativa de la marca, estos procesos pueden quedar en el limbo.

Este caso también deja al descubierto una debilidad del mercado mexicano: actualmente no hay una regulación clara que obligue a las marcas o importadores a garantizar refacciones y soporte por un periodo mínimo tras su salida. Cuando una empresa opera solo como importador y decide retirarse, los clientes quedan prácticamente desprotegidos.

La salida de SEV de México deja dudas entre quienes compraron sus autos. Foto: Cortesía

La experiencia de SEV contrasta con la de otras marcas chinas que sí cuentan con una estructura más sólida en México, redes de distribuidores y respaldo internacional. 

Por ello, especialistas recomiendan que, antes de comprar un vehículo de una marca nueva, se evalúe no solo el precio, sino también su presencia, soporte y planes a largo plazo.

La salida de SEV deja una lección clara: un precio atractivo no siempre garantiza tranquilidad futura. Para quienes ya compraron uno de estos autos, el reto será adaptarse; para quienes piensan adquirir uno, informarse mejor será clave.