Nos ayuda a elegir al mejor candidato. La alternancia en la democracia define el cauce del gobierno hacia donde la mayoría quiere.

La democracia es el ejercicio de votar y ser votado. México ha vivido el más intenso proceso electoral de su historia, por el número de puestos de elección popular en disputa, y el récord de electores depositando el voto.

Quizás el electo no haya sido el que nos gustaba o por el que votamos.

Pero aun así hay que reconocer que quien salió electo fue el mejor.

En nuestro cerebro millones de neuronas nos ayudan a pensar.

En una democracia millones de cerebros con millones de neuronas hacen un mejor trabajo.

Quizás no nos guste ninguno de los candidatos.

Pero son los que hay, son los que llegaron a la final después de una larga selección en sus partidos.

Es lo mejor que había.

Todos son humanos e imperfectos como uno.

No hay extraterrestres perfectos, tenemos que elegir entre puros terrícolas.

Los que llegaron son los más capaces, y de ahí tenemos que escoger.

Pensemos un poco en los candidatos que perdieron en esta elección y en las pasadas.

¿Hubieran sido mejores?

Lo dudo.

La alternancia en la democracia sirve para encauzar al país, estado o municipio hacia donde la mayoría quiere.

Normalmente hacia donde se necesita más.

En esta elección dominó mucho el tender hacia menos corrupción y más seguridad.

Eso es lo que más nos hace falta.

Ahora queda en los ciudadanos apoyar a los elegidos y potenciarlos.

Sumar esfuerzos.

Para lograr más bienestar para todos.