-EN POSITIVO- presentado por Kirey Amano para TBN, trae para ti una reflexión titulada ¿Te ha llegado la desesperanza? Excelente para nutrir el espíritu, toma un breve momento y date el regalo de una lectura de 1 minuto que te puede servir para toda tu vida.
Por: Tus Buenas Noticias
COLABORACIÓN EN POSITIVO POR KIREY AMANO Reflexión "Desesperanza"
Kirey nos dice:
Te comparto la siguiente reflexión, comenzando con preguntarte si a ti ¿Te ha llegado la desesperanza?
Sin dudarlo, creo que todos hemos experimentado este sentimiento, una visión de las cosas que no permite ver otra salida más que la incertidumbre y tristeza.
Un vacío que si bien no es nada que se pueda disfrutar, podemos aprender de él.
Sí, aprender de él, tal vez no en el momento que se nos presenta en la vida, sin embargo, como una invitación a la reflexión y a la comprensión de nuestra realidad. Nos aprieta el alma, nos estruja las ganas y nos come la necesidad de salir adelante.
Y aunque las definiciones son muy exactas y duras, muy en el fondo sabemos que para salir avante de algún reto o desafío, generalmente debemos pasar por estas pruebas para aprender y buscar en nuestro corazón las grandes capacidades que tenemos a la resistencia, a la tolerancia y paciencia.
Claro, no es una regla que tengamos que vivir la experiencia desoladora, pero si te has fijado, aparentara ser una regla de vida.
Muy bien y entonces, me encuentro triste… Y ahora, ¿Qué hago?
En mi experiencia de vida puedo compartirles que algo importante para iniciar la subida es aceptar el momento, abrazarlo e incluso desahogar el alma platicando o compartiendo nuestro sentir.
Yo lo que hago es preguntarme no el -Porqué- suceden las cosas, sino -Para Qué-. Buscarle sentido a lo que vivimos nos brinda por lo menos, de inicio, un camino que recorrer a hacia la mejora, hacia la recuperación. Buscar distintas maneras de resolver eso que nos aqueja y entristece. Pedir y aceptar la ayuda de quien puede apoyarnos y sobre todo, ser humildes al darnos cuenta que no podemos con todo.
Siempre tendremos a la familia, un buen amigo, un compañero de trabajo… alguien que pueda socorrernos y alentarnos a salir del hoyo. Sí, porque así lo vemos… profundo y sin fondo.
Y llega el momento de tomar decisiones. Más pensadas, más frías, menos sentimentalismos y más acción.
Recuerda siempre que todos podemos salir adelante de estas pruebas, no te permitas hundirte, porque sólo tú eres la medicina de la recuperación.
Te dejo este texto para la reflexión:
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