La antigua hacienda de Zacatecas que guarda secretos desde el siglo XVI
Actualmente la ex-hacienda Corrales cuenta con una población de 900 habitantes con un total de 254 hogares. Su historia es misteriosa y fascinante
A lo largo y ancho de su territorio, Zacatecas tiene muchos pueblos y ejidos repletos de historias fascinantes y misteriosas, ya sea desde tiempos de la Revolución Mexicana o incluso mucho antes. Estos lugares son dignos de ser explorados, para que su legado se preserve a la siguiente generación.
Un ejemplo de estos poblados es Corrales, en el municipio de Sombrerete. Actualmente, cuenta con una población de 900 habitantes con un total de 254 hogares. Además, la mayoría de la población se dedica a los negocios agropecuarios, como es común en los ejidos
Este poblado originalmente fue una hacienda, con una vida que se remonta a antes del siglo XVI. Conservando aún estructuras de su época pasada, este lugar paso por varias manos antes de convertirse en el ejido que es hoy en día. Esta es su historia.
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La fundación de la hacienda Corrales
Aunque se comenta que su historia inicia alrededor del año 1723, la hacienda es incluso más antigua, pero no se tienen más registros. Lo que sí se conoce es que era un lugar que se dedicaba a la agricultura y ganadería, que se manejaba por dotación.
Según los datos, primero perteneció a Vicente de Zaldívar y Mendoza (nacido en 1573), hijo del militar Vicente de Zaldívar de Vitoria (conquistador español) y de Magdalena de Mendoza de Granada, ambos provenientes de España.
A lo largo de los años, esta hacienda ha sido testigo de grandes cambios socioeconómicos, incluyendo la transición de la esclavitud a la vida ejidal, reflejando así la evolución de las condiciones laborales en la región, siendo un centro importante para la distribución de ganado en la región de Zacatecas.
Uno de los puntos clave de la formación de la hacienda es que está ubicada cerca de uno de los manantiales más grandes de Zacatecas, aportando alrededor de 80 litros de agua por segundo.
Este recurso hídrico ha sido esencial para la producción de alimentos a lo largo de toda la historia del lugar. Inclusive, aún se utiliza hoy en día, evidenciando la importancia de la gestión del agua en la sostenibilidad de la hacienda.
Revolución y conservación
Debido a los malos tratos que reciban los trabajadores de la hacienda, estos se organizaron durante la Revolución Mexicana para hacer valer sus derechos, transformándose a un sistema ejidal que terminó beneficiando a los locales.
No obstante, a pesar del conflicto, la comunidad ha hecho esfuerzos significativos para preservar su icónica arquitectura. Por eso, hoy en día el 70% de las estructuras originales se mantienen, incluyendo puertas y muros.
Para los pobladores, la conservación de elementos como los espejos y muebles antiguos es vital para mantener la historia viva y accesible para futuras generaciones, buscando preservar el legado de Corrales.
Misterios e importancia cultural
Uno de los grandes misterios que rodean a la hacienda son los supuestos avistamientos de fantasmas, ya que algunos pobladores aseguran haber visto la visión de una mujer peinándose. Este elemento paranormal es parte de la cultura local, añadiendo aún más intriga a un lugar de por sí muy desconocido.
La última familia que habitó la hacienda lo hizo en la década de 1980. Desde entonces, las familias cercanas han mantenido el lugar, pasando a ser un símbolo de la herencia cultural de la región, celebrándose incluso bodas y otros eventos en sus tierras.
De esta manera, esta hacienda no solo destaca por la arquitectura y sus aspectos funcionales, sino también por las historias de las familias que la habitaron, así como su legado cultural para el estado de Zacatecas.
Por eso, se invita a los zacatecanos a conocer en persona la ex-hacienda Corrales, un lugar donde la tradición y la cultura se mantienen vivas a través de sus estructuras y habitantes.
