De ser un pueblo fantasma, ahora es el atractivo turístico más importante de Durango
Un poblado fantasmal de Durango que ahora es un punto turístico por su pasado
Durango. – Una de las primeras comunidades que asentaron en la región de Durango, hubo un lugar que se centró en la explotación de metales preciosos. Su principal producción era oro, plata y hierro. A pesar de que con el tiempo se hizo un pueblo fantasma, se volvió un atractivo turístico y recibe visitantes de todas partes del mundo.
Se trata del pueblo de Ojuela, que se ubica en el municipio de Mapimí en Durango. Este lugar se fundó con propósitos de minería, que con el tiempo también se establecieron casas, locales, centros de servicio y otras comunidades.
Un pueblo en medio de las montañas combina un bello paisaje desértico, contrasta lo que fue aquella arquitectura moderna, y levanta la caridad de los visitantes.
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Ojula el pueblo fantasma de Durango
Este pueblo fue fundado por el conquistador español Francisco Ojuela, quien fue quien descubrió la riqueza mineral que poseía el lugar. En su momento, el poblado contaba con una población de más de 5,038 habitantes y ya había edificios que cubrían cualquier necesidad básica.
Pero, toda riqueza iría en cabeza, debido a la inundación de las minas, por lo cual era imposible tratar el problema y esto trajo como efecto la migración de la población a otras partes. Hasta que la explotación mineral fue concluida y el equipo fue desmantelado el 1 de julio de 1931, a partir de ese momento se volvió un pueblo abandonado.
De “pueblo fantasma” a un “atractivo turístico”
A pesar del abandono, y que el lugar contaba con áreas para subsistir a una población, aun así con el tiempo se ha vuelto un lugar abierto para visitantes. Y explorar lo que fue, el estilo de vida de los habitantes.
Uno de los atractivos turísticos de Ojuela, está el puente colgante, que mide, 336 metros de largo y 1,83 de ancho; y tiene un peso de más de 112 toneladas, que está suspendido sobre la barraca entre el Campo Sur y Ojuela. Para acceder tiene un costo de $120 pesos adultos y niños $60 pesos.
O también está la Mina de Ojuela, que se puede visitar al pasar del puente colgante, en la cual guías de la zona ofrecen recorridos y como última sugerencia, los visitantes pueden pasarse en tirolesa a solo $250 pesos.
