Ahora es cuando se ocupa de tu apoyo
En estos momentos de inseguridad, desorden y miedo en Culiacán, es cuando más se valora tener
En estos momentos de inseguridad, desorden y miedo en Culiacán, es cuando más se valora tener:
- Una Guardia Nacional grande y fuerte
- Un Ejército capacitado y poderoso
- Fuerzas armadas con presupuesto suficiente
- La esperanza de un mejor Poder Judicial
- Un gobierno decidido y apoyado por la gran mayoría de sus ciudadanos
- Una comunidad unida contra los criminales
- Unas buenas Policías Estatales
- Unas buenas Policías Municipales
Los criminales narcos han estado operando desde 1970.
Ya tienen 50 años, están en todos los estados.
Han crecido en todos los gobiernos y se han fortalecido.
Su negocio les produce muchos ingresos y recursos.
Ningún gobierno federal ha podido con ellos.
Desgraciadamente hay muchos consumidores de drogas que les dan dinero y con eso se arman.
Muchos de sus consumidores son extranjeros, especialmente gringos.
La gran esperanza es que este nuevo gobierno pueda aplacarlos, dominarlos y reducirlos a lo mínimo o desaparecerlos.
Las grandes inversiones en seguridad son muy necesarias y aplaudibles.
La creación de la Gran Guardia Nacional es una medida adecuada.
El apoyo del Ejército y Marina en la seguridad interior es importantísimo.
La continuidad de estilos de gobierno ayudará a fortalecer estas fuerzas del orden.
Los narcos son malos, asesinos, torturadores, violadores, rateros, extorsionadores, delincuentes, etc.
Agreden a la población, a los ciudadanos.
Provocan que el país no tenga desarrollo.
Asustan a los inversionistas, turistas y a todos los ciudadanos.
Son personas adictas, drogadictos, dementes, están mal de la cabeza, son sicarios, asesinos.
Y al mismo tiempo son personas y ciudadanos como cualquiera de nosotros.
Pero están en el camino del mal.
Cuando ellos quieran pueden cambiarse al camino del bien.
Sigamos apoyando a nuestras autoridades y fuerzas del orden.
Es increíble que muchos policías y militares mueran cada año por defendernos y no los reconozcamos.
No valoremos lo que hacen por nosotros.
Dieron la vida por nosotros.
Merecen nuestro respeto, todos los que combaten a los delincuentes.
