¿Cómo romper dogmas para mitigar adicciones?
En el abordaje del consumo problemático de drogas, los datos demuestran que las viejas creencias son un obstáculo significativo para el desarrollo de soluciones efectivas
La oferta y demanda de drogas requiere una perspectiva despojada de dogmas porque el consumo no disminuye. Y si es así, es porque podrías ser otro enfoque con el que se intente superar el problema.
De 2020 a 2023, en Sinaloa hay un aumento del 33 por ciento de urgencias, hospitalizaciones y defunciones por consumo problemático de estas sustancias. Recientemente, la Cosama dio a conocer que el uso de metanfetamina en México aumentó 416 por ciento en una década, es decir, de 2013 a 2023.
Los dogmas son creencias arraigadas que se aceptan sin cuestionamiento. En el abordaje de las adicciones, los datos demuestran que estas creencias son un obstáculo significativo para el desarrollo de soluciones efectivas.
¿Cuál es el enfoque tradicional en la prevención y atención de adicciones? Las tradicionales charlas drogocentristas, en las que se intenta persuadir a niñas, niños y jóvenes de que no consuman.
Las charlas drogocentristas son intervenciones educativas centradas en el tema de las drogas, utilizadas comúnmente como práctica de prevención. Estas charlas suelen enfocarse en informar a las infancias y jóvenes sobre los diferentes tipos de sustancias, sus efectos en el cuerpo y la mente, y las consecuencias negativas asociadas con su consumo.
Y con el aumento del 416 por ciento en una década desde la incursión de la metanfetamina en el mercado mexicano, claramente vemos que las palabras se las lleva el viento.
El enfoque socioemocional
Con la persona en el centro de la estrategia, las políticas públicas para prevenir y atender el consumo problemático de drogas promete resultados efectivos.
En las casas, la colonia, escuelas y centros de esparcimiento (y a veces también en los deportivos) las niñas, niños y jóvenes están expuestos a presiones ante la disponibilidad y alta oferta de drogas.
El abordaje socioemocional aborda de manera integral los factores de riesgo de niña, niños y jóvenes y fortalece sus habilidades personales para tomar decisiones saludables. Es decir, no sólo informa atendiendo la lógica, sino que entrena desarrollando el pensamiento crítico.
Otro factor importante es que este enfoque se basa en evidencia científica y en la comprensión profunda de los factores sociales y culturales que influyen en el problema.
Desde hace dos años se implementa en Sinaloa el programa Decide Yo Sí Digo No, que lleva a cabo una alianza entre el Centro Estatal de Prevención Social de la Violencia del SESESP, SEPyC y la organización de la sociedad civil Sociedad Educadora.
Este programa integral se conforma por implementación de talleres en los que entrenan a chicas y chicos a identificar sus factores de riesgo y de protección, se identifican los factores de riesgo en sus entornos y se crean planes de acción personalizados para cada escuela.
Los dogmas afectan la percepción de las soluciones posibles. El pensamiento crítico, la ciencia y la cooperación entre entidades públicas y privadas la enriquecen.
El consumo de drogas tiene diversas causas o factores, como la venta al narcomenudeo, el entorno de la persona y su salud socioemocional y mental.
Atendiendo esto, podríamos desarrollar respuestas efectivas que realmente contribuyan a reducir el impacto devastador de las adicciones en nuestra sociedad.