Ángel Ignacio: Un joven talento sinaloense que canta con el corazón, conmueve e inspira con su pasión por la música
“Veneno Mortal”: Ángel con su emotiva canción, el alumno del COBAES 24 logró cautivar al jurado y al público, ganando el primer lugar en el Encuentro Estatal de Canción Inédita 2025, celebrado durante el Festival Cultural COBAES-Escuinapa
Culiacán, Sinaloa.- A sus 15 años, Ángel Ignacio Hernández Hernández no solo canta, siente cada nota que sale de su alma.
Con una herencia musical que corre por sus venas, este joven originario de El Huajote, comunidad del municipio de Concordia, conquistó el primer lugar en el Encuentro Estatal de Canción Inédita 2025 de COBAES, dejando claro que la pasión por la música mexicana sigue viva y vibrante en las nuevas generaciones.
Ángel Ignacio, la voz joven que canta con el alma y mueve corazones en Sinaloa
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Hoy, viviendo en Culiacán junto a su familia desde hace cuatro años en busca de mejores oportunidades. Su esfuerzo y amor por el arte lo posicionan a Ángel Ignacio como uno de los jóvenes más prometedores en el ámbito musical de Sinaloa.
Representando orgullosamente al COBAES 24, ubicado en la colonia Emiliano Zapata, logró conmover al jurado y al público con su interpretación de “Veneno Mortal”, una composición propia con un fuerte mensaje de prevención contra el uso de drogas, en el marco de la campaña “Aléjate de las drogas. El fentanilo te mata”.
“Yo no me consideraba compositor, pero lo intenté porque me lo pidió mi maestra Lucía. En menos de dos semanas ya tenía mi canción. Ella me ayudó con los arreglos finales y fue con esa canción que gané”, comparte Ángel con una sonrisa tímida pero segura.
La voz del alma, herencia del corazón. La historia musical de Ángel no es fruto del azar, sino de amor y legado. Desde pequeño, convirtió la plazuela de su pueblo en su escenario favorito, donde cada fin de semana regalaba canciones a cambio de unas monedas y muchas sonrisas.
Pero más allá del aplauso del público, lo que realmente lo impulsaba era la mirada orgullosa de su abuelo Laurencio Hernández (QEPD), vocalista de la agrupación “La Dominguera” y su fan número uno, quien sembró en él la semilla del amor por la música y le enseñó que cantar con el corazón es la forma más bella de honrar la vida.
“Mi abuelito siempre me animaba con palabras llenas de cariño y sabiduría. Uno de sus consejos que llevo en el corazón es: ‘Siempre sé humilde, porque la humildad te permite aprender y aceptar las críticas que te hacen crecer’. ‘Amor eterno’, es mi canción favorita de Juan Gabriel, y se la dedico siempre al gran hombre que creyó en mí desde el principio”, comparte Ángel, con la voz entrelazada de emoción y gratitud, al recordar a quien fue su primer y más grande admirador.
Con voz de mariachi y sueños de ingeniero. Desde hace dos años, Ángel forma parte del reconocido mariachi “Plata de Culiacán”, donde su potente voz ha encontrado un espacio para brillar junto a músicos experimentados.
Pero su pasión no termina ahí: sueña con estudiar Ingeniería Automotriz, sin dejar de lado la música que tanto ama. Quiere demostrar que los sueños pueden convivir y que se puede ser muchas cosas a la vez cuando se trabaja con corazón.
Para seguir mejorando, toma clases con la talentosa mezzosoprano Angélica Matta, convencido de que siempre hay algo nuevo por aprender, siempre una nota más alta por alcanzar.
Inspirar a través de la música. Ángel no solo canta para cumplir un sueño personal; lo hace para tocar corazones, para inspirar a otros jóvenes a seguir lo que les apasiona, para recordar que el arte también puede salvar vidas y abrir caminos.
Su historia es un ejemplo vivo de que el talento florece donde hay esfuerzo, amor y fe en uno mismo. Porque como bien dice Ángel, “sí se puede, si le echas ganas y no dejas de creer en ti”.
Y él lo está demostrando: cantando con el alma, honrando sus raíces y escribiendo su propio destino, nota por nota. Desde la plazuela de su pueblo natal hasta los escenarios estatales, Ángel Ignacio Hernández Hernández es más que una promesa: es la prueba de que los sueños sí se alcanzan cuando se persiguen con pasión.
Con cada canción que interpreta, Ángel Ignacio no solo lleva en alto el nombre de la música mexicana, sino que siembra inspiración en quienes lo escuchan. Porque cuando se canta desde el corazón, la música no solo suena… transforma.
Es un aliado de la música que canta la poesía mexicana, la que hace bien.
