SuKarne: ¿Cómo se convirtió en la empresa de carnes más grande de México?
Hoy en día, SuKarne es líder indiscutible en la producción de carnes en México y el mundo. Pero ¿cuál es la historia detrás de este admirable éxito?
Pocas empresas en México y el mundo pueden presumir del éxito que ha tenido SuKarne, que después de décadas en crecimiento con un modelo de negocio brillante bajo el liderazgo del sinaloense Jesús Vizcarra destaca en el sector, donde la calidad y la accesibilidad son sus sellos.
La clave del éxito de SuKarne reside en un original modelo de negocio, que ha sabido aprovechar las oportunidades del mercado para convertirse no sólo en la marca de carnes más reconocida de México, sino una de las más grandes exportadoras de proteína animal en el mundo.
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México: productor mundial de carne
Antes de adentrarnos a la historia de SuKarne, hay que tomar en cuenta la importancia de México en la producción mundial de carne.
Actualmente, en 2025, se alza como el quinto productor de carne de res a nivel mundial. En 2021, según nos cuenta White Paper, ocupaba el lugar séptimo u octavo en la lista, es decir, produciendo cerca del 3.4% de la carne en el planeta.
Y si del mercado mexicano hablamos, desde entonces SuKarne ya se alzaba como líder indiscutible, con el 60% de participación en el mercado nacional, con casi 800 mil cabezas de ganado, mientras que sus competidores más cercanos tenían apenas entre 150 y 200 mil.
Las oportunidades que SuKarne supo ver
Ahora bien. El 37% de los ingresos de SuKarne provienen de la exportación de carne y de sus operaciones en México, mientras que el 62% de las ventas son a través de su propia red de distribución, y las cadenas de autoservicio son apenas el 15% de las ventas, aunque son clave en dar a conocer la marca.
"SuKarne es la marca más reconocida a nivel nacional, pero los productos que la gente ve con la marca SuKarne, como la arrachera, la hamburguesa o la carne deshebrada no representan más del 7% de las ventas", explicó el director de desarrollo de negocios de SuKarne, Efraín Reséndiz, a White Paper.
Un aspecto clave en el éxito de la empresa es que supo aprovechar cada parte de la res para comercializar. Además de ser los mayores proveedores de las charolas de carne en supermercados, su negocio más grande son los taqueros, los carniceros y los pequeños restaurantes, a quienes les venden las cajas de carne incluso ya picada, en el caso de las taquerías.
Cada parte de la vaca se aprovecha
¿Y qué partes de la vaca son las que se venden? En el caso de México, sólo el 10% de la demanda de carne es por cortes finos como rib-eye, new york y t-bone, mientras que el 20% es de los llamados cortes medios, como arrachera, chambarete y sirloin, y el 70% restante corresponde a cortes económicos, como el bistec, las pulpas, entre otros.
Sin embargo, de una res, alrededor del 20% se usa para cortes finos, entre 30 y 40% para cortes medios, y de 40 a 50% para cortes económicos. Esto significa que en México se daba un sobrante de carne para cortes finos y medios, y faltaba para cortes económicos.
SuKarne entendió esto desde finales de 1990, a medida que aumentaba sus exportaciones y analizaba los hábitos de consumo de Estados Unidos, el cual comenzó a aprovechar. "La estrategia se convirtió en exportar todo lo que puedo, hacia donde mejor lo pagan en el mundo, y déjame traerme lo que en otros lados no quieren pero que en México sí lo aprecian", explicó el directivo.
Por ejemplo, los músculos del pecho y de las piernas de la res, que en Estados Unidos se usaban principalmente para la producción de salchichas, en México se consumen como productos de valor mayor. Algo similar ocurre entre estados del país, pues mientras en Monterrey prefieren el labio de res, en municipios como Saltill prefieren el cachete.
Por otro lado, la lengua de res que produce SuKarne se destina casi en su totalidad a Japón, que destaca como el mayor consumidor del mundo, además de que la paga hasta 4 o 5 veces más que su precio en México. Estas diferencias fueron clave para que la empresa sinaloense detonara su crecimiento como exportador global.
La historia de SuKarne: de empresa familiar a gigante mundial
A principios de 1997, Valores Corporativos -la empresa regia que controlaba Grupo Chapa, Chapa Abarrotes y la franquicia de 7-Eleven en México- anunció sus planes de invertir $200 millones de pesos para duplicar su número de tiendas en el país.
Como parte de este plan, puso en venta su división agropecuaria: Empacadora SK, que por entonces ya producía más de 40 mil cabezas de ganado al año y vendía cerca de $180 millones de pesos anuales.
Quien terminó adquiriendo a Empacadora SK fue Grupo Viz, de Sinaloa, que desde finales de 1970 tenía como líder del negocio familiar al empresario Jesús Vizcarra, con sede en Culiacán, y ya tenía una importante presencia en la región.
Como parte del modelo de negocios impulsado por Vizcarra, para 1985 la empresa familiar ya concentraba en una misma ubicación los procesos de engorda, sacrificio y empaque de la carne, pero ahora con SuKarne como marca comercial, manteniendo un crecimiento sostenido durante más de 30 años.
Para 2003, SuKarne había recomprado sus acciones a los fondos, ya consolidada como una empresa con ventas de más de $600 millones de dólares. Siguieron creciendo. Sumando unidades ganaderas integrales, plantas de procesamiento, más su amplia red de logística de centros de distribución, rutas y tiendas, llegando a exportar cerca del 70% de la carne que México envía al extranjero.
A la producción y comercialización de carne la complementan otras operaciones que SuKarne ha sabido aprovechar, como el negocio de pieles para la industria automotriz y aeroespacial, que representa el 60% de participación de México, así como un negocio de fertilizante orgánico, usando el estiércol del ganado.
Hoy en día, SuKarne cuenta con presencia en cuatro continentes y más de 13 países, con un equipo conformado por más de 15 mil colaboradores en México, Centroamérica y Estados Unidos, que juegan un papel clave en el crecimiento de la empresa.
Los retos de SuKarne
Entre los principales retos que SuKarne enfrenta por la naturaleza de su giro están: la volatilidad en los precios de insumos y de la carne, ya que están sujetos a precios internacionales, así como la creciente conciencia del impacto ambiental sobre la producción de carne.
Sin duda, bajo el liderazgo de Jesús Vizcarra, SuKarne logró convertirse en una de las productoras de carne más grandes de todo el continente americano. Más de 30 años después, él y su familia siguen al mando de la empresa, con una participación menor de otros empresarios y ejecutivos.
El futuro para SuKarne está lleno de retos, pero también es prometedor, pues se trata de una empresa a la que pocas de su tipo pueden compararse, destacando como una de las más grandes a nivel mundial en cuanto a la producción de carne y proteína animal.
Con información de White Paper.
