Llorar puede hacerte más feliz

Aunque llorar para ser más feliz parezca contradictorio, derramar algunas lágrimas puede ser una de las mejores formas de restablecer el equilibrio emocional.
Un estudio de 2014 encontró que el llanto emocional activa el sistema nervioso parasimpático, que regula las acciones de “descanso y digestión” del cuerpo.
Llorar también eleva los niveles de endorfinas y oxitocina, lo que ayuda a aliviar el dolor tanto emocional como físico.
Y el acto físico de llorar (aspirar grandes bocanadas de aire) enfría el cerebro y ayuda a regular el estado de ánimo.
Considerándolo todo, “llorar mucho” puede ser bueno para ti.

Por supuesto, que llorar te haga sentir mejor también puede depender de la situación.
Se sabe que las lágrimas inspiran beneficios interpersonales al indicarles a los demás que necesitas apoyo.
Como era de esperar, los estudios han demostrado que las personas que reciben apoyo después de llorar tienen más probabilidades de sentirse más felices que si se sienten avergonzadas por llorar.
Entonces, si bien el acto físico de llorar puede ayudar a nuestros cuerpos a regresar a la homeostasis emocional, es el apoyo de amigos y seres queridos lo que hace que esos buenos sentimientos perduren.

Los humanos son los únicos animales que lloran lágrimas emocionales.