España desmantela una red del Cártel de Jalisco Nueva Generación con 20 detenidos y más de 1.8 toneladas de cocaína
España desmantela una operación internacional del cártel que utilizaba equipo industrial para camuflar cargamentos ilícitos
Las autoridades españolas asestaron un golpe significativo al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) al detener a 20 personas vinculadas con una estructura criminal que, según las investigaciones, operaba desde distintos puntos del país. La red utilizaba maquinaria pesada como fachada para trasladar droga camuflada en compartimentos especialmente adaptados para evitar su detección.
El operativo, considerado uno de los más relevantes de los últimos años en materia de narcotráfico internacional, reveló el sofisticado sistema logístico con el que funcionaba la organización. Las autoridades aseguran que esta detención no solo frena un flujo de droga hacia Europa, sino que también exhibe la presencia creciente del cártel mexicano en el continente.
Expansión del CJNG en Europa
La investigación encabezada por la Policía Nacional de España, en colaboración con agencias de inteligencia extranjeras, permitió rastrear los movimientos del grupo desde su llegada al país. Aunque su presencia había sido detectada anteriormente en operaciones aisladas, esta red constituía una de las células mejor estructuradas del CJNG en territorio europeo.
El cártel habría aprovechado el creciente mercado de drogas sintéticas y cocaína en Europa para reforzar su participación, apostando por rutas menos vigiladas y métodos de ocultamiento cada vez más complejos. Este caso confirma, según expertos, que las organizaciones criminales mexicanas continúan intentando diversificar sus operaciones más allá del continente americano.
Modus operandi: Droga oculta en maquinaria industrial
La célula desmantelada utilizaba maquinaria pesada (principalmente excavadoras, compactadoras y equipos de construcción) para esconder cargamentos de droga. Los compartimentos modificados podían pasar desapercibidos incluso en controles avanzados, lo que permitió a la red enviar mercancía desde varios puntos del país hacia distintos destinos de Europa.
Además, la organización contaba con técnicos especializados capaces de intervenir la maquinaria sin dejar rastros visibles. Este método, según autoridades españolas, se ha vuelto más recurrente en organizaciones de alto nivel debido a su efectividad para evadir revisiones ordinarias en puertos y almacenes.
Esto es lo que las autoridades españolas incautaron con la operación Oyamel:
- 1,870 kilos de cocaína.
- 375 kilos de anfetamina.
- 275,000 euros en efectivo.
- Criptomonedas con un valor de 15,000 dólares.
- 3 armas cortas de fuego.
- 15 vehículos.
- 14 kilos de plata.
Detenciones y líneas de investigación abiertas
Las autoridades detuvieron a 20 personas de distintas nacionalidades, presuntamente responsables de coordinar el empaquetado, transporte, almacenamiento y distribución de la droga. Entre ellos se encuentran:
- Operadores logísticos.
- Encargados de talleres.
- Presuntos enlaces internacionales del cártel.
Aunque el operativo logró frenar las actividades inmediatas de esta célula, la investigación continúa abierta, pues las autoridades buscan determinar si existían otras redes conectadas en países vecinos o si el CJNG planeaba expandir aún más sus operaciones en Europa.
Con estas detenciones, España envía un mensaje claro frente al avance de organizaciones criminales internacionales: la vigilancia se intensifica y los métodos de camuflaje más elaborados no garantizan impunidad. La caída de esta red marca un precedente en la lucha contra el narcotráfico transnacional y refuerza la cooperación internacional para frenar el alcance del crimen organizado.
