“Por qué no acordamos una paz que suponga un regalo para el mundo?” - Moon Jae-in, líder de Corea del Sur.

Casi 68 años después de la guerra, los líderes de Corea del Norte y del Sur, decidieron avanzar con rumbo a la paz. Por ello, el día 27 de abril será recordado como un momento histórico en la humanidad.

“Una nueva Historia empieza desde ahora. En el momento en que empieza una era de paz”. Es el mensaje inscrito por Kim Jong-un, el líder supremo norcoreano, en el libro de honor al comenzar la cumbre en la Casa de la Paz en Panmunjom con el líder surcoreano Moon Jae-in.

Con semblante serio y vestido para la ocasión, el líder norcoreano inició el recorrido por los escalones rumbo a la línea de demarcación militar, y allí, entre las casetas azules reservadas para las conversaciones militares, le esperaba Moon.

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Aquellos semblantes tensos, fueron derribados con sonrisas y apretones de manos, marcando así el comienzo de la paz entre las coreas.

La temática de la reunión se basó en la pregunta elaborada por el líder surcoreano: “por qué no acordamos una paz que suponga un regalo para el mundo?”, la cual dio como resultado acciones que beneficiarán a la sociedad y al planeta entero.

• El acuerdo de desnuclearizar la península.
• Avanzar con rumbo a la paz.
• Promover reuniones entre familiares coreanos que viven separados por la frontera.

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Las coreas “están unidas por la sangre como una familia y los compatriotas no pueden vivir separados.

Asimismo, Moon Jae-in (Corea del Sur) acordó visitar la capital norcoreana en otoño, poco después del acuerdo de juntarse periódicamente.

También anunciaron que impulsarán de forma conjunta conversaciones con Estados Unidos, y posiblemente con China, para poner fin a la guerra (1950-1953).

De esta manera, la cumbre histórica ayudará a estrechar los lazos y crear un historial más pacífico y armonioso entre las dos naciones; el cual comenzó con el estrechamiento de manos y las sonrisas de oreja a oreja entre los mandatarios.