Ser justo toma tiempo y un largo camino que lleva a la satisfacción

"Las decisiones justas no son populares, son moralmente correctas".

(TBN) El doctor Pablo Ayala Enríquez es un ciudadano entregado a la búsqueda de una empatía social con una moral justa quien ha desarrollado una metodología para lograrlo.

Invitado como conferencista ante jóvenes, activistas y administrativos del Tecnológico de Monterrey Campus Sinaloa, planteó: "Claves para comprender la Desafección ciudadana".

Durante su dinámica presentación el doctor en Ética y Democracia por la Universidad de Valencia, señala que la sociedad está acostumbrada a vivir en una cultura de corrupción.

Comenta que existe una "miopía moral o ciudadana" al no querer darse cuenta que el 54 por ciento de la población se encuentra dentro de un tipo de pobreza, ya sea de capacidades o patrimonial.

Entonces, ¿cuál es la fórmula de la desafección ciudadana?. Se toman en cuenta la pericia del gobierno, el grado de pobreza y la venilidad.

Mediante un ejemplo práctico e invitando a la audiencia a participar, el conferencista mencionó la forma en la que la sociedad se encuentra bajo un esquema de activismo digital.

¿Activismo digital?. En efecto, destaca como la gran mayoría de las personas se quejan de alguna situación que consideran injusta mediante las redes sociales, pero en persona; no son capaces de activarse.

A este fenómeno lo denomina como "agencia moral pasiva" y lo explica como el sentir de la persona por ayudar sin realizar acción alguna.

En palabras propias, Pablo Ayala comenta que "el título de ciudadano se gana, hay que levantarse y hacerlo por la sociedad".

Bajo su opinión personal considera que las razones de carácter moral para no meternos al problema y ayudar a un tercero son las siguientes:

1. Justificación Moral.- "Actúo si la sociedad tendrá un beneficio mayor".
2. Etiquetado Eufemístico.- "Reducir o minimizar una acción".
3. Comparación Paleativa.- "Comparar una situación con otra de grado más elevado".
4. Disolución de la Responsabilidad.- Se distribuye la responsabilidad lo que equivale a decir "Yo no soy el único".
5. Desplazamiento de la Responsabilidad.- Dejar en manos de otros "más capaces".
6. Distorsión de las Consecuencias.- Minimizar el resultado.
7. Deshumanizar a las Víctimas.- "Las acciones no son tan malas".
8. Atribuir la culpa a Circunstancias.

Por lo mencionado con anterioridad extendió una invitación a los espectadores, a desactivar esta apatía social que existe a nivel mundial.

Mediante 3 pasos, la responsabilidad del acto, el análisis de los deberes morales y los efectos de la toma de decisión.

Para poder comprender esta metodología fue necesaria la participación de un espectador, quien planteó una situación para la cual; el análisis incluía diversas perspectivas.

En donde la persona al analizar el problema y tomar una decisión, debía ser responsable y preguntarse si esa decisión estaba alineada a los resultados que esperan los demás. Ya sea la institución, donde trabaja, entre otros.

Posteriormente se cuestionaba si la decisión sería avalada por la sociedad y, si esta misma, reflejaría sus principios éticos. Al final consideraba los efectos de su decisión, si comprometían el bienestar de la persona.

Ante este planteamiento concluyó que cada individuo debe asumir la responsabilidad de sus actos y decisiones, además debe ser congruente con sus valores y hacerse cargo de los efectos que conlleva.

A fin de un beneficio social común que trascienda en las nuevas generaciones.