"persistir" EN POSITIVO por Kirey Amano para TBN

EN POSITIVO por Kirey Amano presenta "persistir"

Kirey nos dice:

Persistir…

Sin duda nos cansamos, nos enfadamos… nos hartamos, sí, llegamos a un punto en donde ya no queremos seguir y menos aún pensar en volver a empezar. Difícil momento que, sin temor a equivocarme hemos experimentado  todos y que aparenta darnos un permiso para claudicar, para dejar de luchar y avanzar.

Es válido quejarse, somos seres humanos,  incluso llorar, patalear y cuestionar es sano para liberar el alma y expresar nuestros sentimientos, pero nunca será una excusa para dejar de insistir: Tus sueños, tus ganas de salir adelante, tus planes laborales, tu vida…todo eso que te inspira y te mueve, eso, es por lo que vale la pena continuar. Sí, tal vez suena muy trillado, pero es la verdad: Nada va a suceder en tu vida si no luchas por lograrlo, aún con las malas rachas y los sinsabores. Lo que separa al éxito del fracaso es la persistencia, sin duda una frase que aunque pasen los años seguirá siendo ley para quien ve en la vida una constante prueba a vencer.

Respira profundo, date la oportunidad de enfocar el rumbo nuevamente, ten el valor de ver la enseñanza que te ha dejado esa experiencia, acepta donde estuvo el error y sigue…

Te dejo esta reflexión que me gusta mucho :

¡SACÚDETE Y SUBE!

Se cuenta de cierto campesino que tenía una mula ya vieja. En un lamentable descuido, la mula cayó en un pozo que había en la finca.

El campesino oyó los bramidos del animal, y corrió para ver lo que ocurría. Le dio pena ver a su fiel servidora en esa condición, pero después de analizar cuidadosamente la situación, creyó que no había modo de salvar al pobre animal, y que más valía sepultarla en el mismo pozo.

El campesino llamó a sus vecinos y les contó lo que estaba ocurriendo y los enlistó para que le ayudaran a enterrar la mula en el pozo para que no continuara sufriendo.

Al principio, la mula se puso histérica.

Pero a medida que el campesino y sus vecinos continuaban paleando tierra sobre sus lomos, una idea vino a su mente. A la mula se le ocurrió que cada vez que una palada de tierra cayera sobre sus lomos... ¡ELLA DEBÍA SACUDIRSE Y SUBIR SOBRE LA TIERRA!

Esto hizo la mula palazo tras palazo.

Sacúdete y sube. Sacúdete y sube. Sacúdete y sube!! Repetía la mula para alentarse a sí misma.

No importaba cuán dolorosos fueran los golpes de la tierra y las piedras sobre su lomo, o lo tormentoso de la situación, la mula luchó contra el pánico, y continuó SACUDIÉNDOSE Y SUBIENDO. A sus pies se fue elevando de nivel el piso.

Los hombres sorprendidos captaron la estrategia de la mula, y eso los alentó a continuar paleando. Poco a poco se pudo llegar hasta el punto en que la mula cansada y abatida pudo salir de un brinco de las paredes de aquel pozo.

La tierra que parecía que la enterraría, se convirtió en su bendición, todo por la manera en la que ella enfrentó la adversidad.

Persistir, insistir, resistir y NUNCA desistir.

Kirey Amano 

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