Tus Buenas Noticias
Síguenos

AARÓN ACOSTA; “ TODOS TENEMOS LA CAPACIDAD DE SER FELICES ”

16 diciembre, 2015
AARÓN ACOSTA; “ TODOS TENEMOS LA CAPACIDAD DE SER FELICES ”
AARÓN ACOSTA; “ TODOS TENEMOS LA CAPACIDAD DE SER FELICES ”

Todos tenemos la capacidad de ser felices.

“Yo soy Aarón”, es el libro que presentó Aarón Acosta, quien a los 18 años, mientras cursaba su primer semestre de universidad y trabajaba en un restaurante de comida, sufrió una descarga eléctrica tan grande que tuvieron que amputarle manos y pies, accidente que no lo derrotó mentalmente, indicando: “Muchas veces no podemos cambiar los caminos que nos toca recorrer, pero sí depende de nosotros cómo los vamos a enfrentar y continuar”.

“Recibí una descarga eléctrica de 64 mil voltios, casi todos se mueren y yo aquí sigo dando lata. Trabajaba en un restaurante de comida de pollo y fue ahí donde sufrí el accidente, estaba estudiando el primer semestre de Ingeniería en Sistemas y los fines de semana era repartidor”, relata Aarón Acosta en su historia.

El accidente ocurrió un 27 de diciembre; tenía planes, iba a salir con su novia, un hermano y su novia a ver películas, pero todo cambió: esa tarde él estaba en una cama de hospital. Tuvo que pasar por nueve cirugías, pero los doctores buscaban salvar sus extremidades, por lo que drenaban la sangre quemada de su cuerpo.

Poco a poco se fueron haciendo las amputaciones, primero de una mano, luego los dedos de un pie, luego la otra mano, después ambos pies. “Dicen que un parto es lo más doloroso que hay; yo creo que cuando me amputaron los pies tuve un hijo y nunca me lo entregaron, porque el dolor era impresionante”, indica Aarón.

Aarón cuenta que el dolor de la amputación de las manos era muy fuerte, pero el de los pies era insoportable, tanto que tuvieron que suministrarle morfina, pero ni así podía soportarlo. El joven vivía en aquel entonces en la colonia CTM, en Chihuahua, y regresar a su casa después de las amputaciones fue volver a la realidad de su nueva vida.

“Estaba en silla de ruedas, pero ni siquiera podía darle a la silla, porque no tenía manos. No me dejé vencer y quedarme a que hicieran las cosas por mí; volví a trabajar en el restaurante, pero ahora en el área de Sistemas, que era lo que estudiaba; ahí me di cuenta que no era lo que quería para toda la vida y decidí cambiarme a la licenciatura en Derecho”, relata Aarón.

El ahora abogado indica que las prótesis de manos y piernas se las entregaron en el hospital Shriners; una tía que vivía en Monterrey hizo el contacto y de ahí fue a Galveston, Texas, a recibir una terapia básica para comenzar a usar sus prótesis, que sólo le sirvieron para comenzar, ya que cada día aprende a utilizar herramientas distintas con ellas.

“Nunca renegué de Dios y de la situación que me pasó, quizá no sabía muy bien, o no me cayó bien el veinte del accidente porque siempre estuve muy apoyado por mi familia, amigos y mi novia, además de que no me dejé vencer. Comencé a hacer mi vida nuevamente”, señaló Aarón.

Por azares del destino algunas asociaciones civiles comenzaron a invitarlo para dar testimonio de su accidente, y fue así como poco a poco fue dando más de sí a las personas que lo escuchaban, ya que en un principio su público era de 20 a 30 personas, ampliándose a 200 o 300 que se identificaban con la vida de Aarón.

“Siempre he sido muy optimista, nunca me sentí relegado de ningún lugar o por ninguna persona”, indica Aarón, quien decidió no sólo llevar su mensaje a través de pláticas, sino que quiso plasmarlo en un libro que se titula “Yo soy Aarón”, donde cuenta todo lo que vivió desde su accidente y cómo superó perder sus piernas y brazos y seguir luchando en la vida.

Aarón es ahora un abogado que trabaja en su propio despacho; está casado con Perla y tienen dos hijas: Alainne, de 14 años, y Yara, de 8; además, tiene la Fundación Motivos en Acción, A.C., mediante la que lleva un mensaje de inclusión para personas que han sufrido amputaciones o tienen una discapacidad física, en sectores de salud, escuelas, empresas y púbico en general.

El mejor mensaje que Aarón Acosta indica puede dejar a las personas a través de su libro, es: “Si cambias tu forma de ver la vida, tu misma vida puede cambiar”.

Fuente: http://bit.ly/1MfiFw8

Imagen: tomada de la fuente.


Temas de esta nota
Enlaces patrocinados