El histórico desempeño del sinaloense Francisco Fong en las Sordolimpiadas 2025 inspira a México al demostrar que el deporte y la lengua de señas unen culturas, rompen barreras y celebran la inclusión.
En un estadio donde el silencio es respeto y la comunicación viaja a través de las manos, los gestos y la emoción, el equipo mexicano de futbol que participó en los Juegos Sordolímpicos 2025 nos regaló al mundo uno de los momentos más conmovedores de esta justa internacional.
Francisco Fong y cada integrante de la selección no solo representaron a México en la cancha, sino que lo hicieron desde lo más esencial: la fidelidad a su cultura, a su lengua y a la lucha constante por el reconocimiento de la comunidad sorda de nuestro país.
El Sinaloense Francisco Alberto Ibarra Fong de 29 años, de gesto duro, retador y una persona resiliente. Acorazonado con el dulce amor de su madre Rosa Fong López, fundadora de la Asociación Deportistas Sordos Sinaloenses, Francisco desde que tenía cuatro años empezó a jugar futbol, les gustaba ver en la televisión la caricatura de “Supercampeones”.
La resiliencia de Francisco lo mantuvo estoico en este deporte hasta que en 2019 se hizo realidad otro de sus sueños: ser seleccionado nacional, lo que lo llevó a Chile y luego a las Sordolimpiadas en el 2021 en Caxias do Soul, Brasil, en donde junto con su equipo se ganaron el boleto para Tokio 2025.
¿Cuál fue la respuesta de las autoridades?
El Torneo arrancó el pasado 15 y finalizando el 26 de noviembre, en donde México se enfrentó a las selecciones de Italia, Australia y Japón, perdiendo en los dos primeros juegos y empatando el tercero con Gol de penal de Francisco Fong.
Sin duda alguna más allá de los resultados, este equipo dejó el alma en cada jugada, dejando huella tanto dentro como fuera de la cancha, un llamado de igualdad y una invitación para que el país entero reconozca y celebre la riqueza lingüística y cultural de la comunidad sorda.
En DXT Sports, reconocemos que este momento no es anecdótico: es histórico. Porque el Himno Nacional Mexicano en Japón, en lengua de señas, es cantar un país que escucha con el alma y habla con el corazón.