El impresionante tren más largo del mundo en Suiza
Tiene una longitud de 1,906 metros con capacidad de transportar 100 vagones con un peso total de 2, 990 toneladas
El pasado 29 de octubre en lo alto de los Alpes suizos, San Moritz en celebración del 175° aniversario del primer ferrocarril en Suiza, se llevo a cabo la operación del tren de pasajeros más largo en el mundo.
“Capricornio” es el nombre que tiene este nuevo tren suizo poseedor de 25 trenes eléctricos, 1,906 metros de longitud, 2, 990 toneladas y 100 vagones. El nuevo tren de pasajeros recorrió 25 kilómetros por la línea Albula en un tiempo de casi una hora en su trayecto de Preda hasta Alvaneu en Suiza.
Una celebración
Este gran monstruo ferroviario que necesitó de 7 conductores, 21 técnicos, un software modificado y un intercomunicador fueron los necesarios para que estos 25 trenes pudieran realizar su viaje a pesar que en las pruebas iniciales había fallado su sistema de freno de emergencia, pero todo resultó a favor al final del día.
Era una fecha tan importante que RhB (Ferrocarril rético en el paisaje de los ríos Albula y Bernina) organizó a manera de festival el paso de este tren junto a asistentes y personas que podían verlo desde televisión.
Con tres enlaces por satélite, 19 cámaras de drones y helicópteros filmó el paso de 35km/h que tuvo este tren. Una velocidad un tanto limitada, pero fue la necesaria para evitar problemas de corriente en el sistema. De igual forma, se tuvieron que tomar precauciones instalando cables de control de seguridad para reforzar las conexiones mecánicas entre los trenes.
¿Por qué se construyó un tren tan largo?
La Línea Albula es una de 62 kilómetros entre Thusis y St. Moritz conocida por sus curvas empicadas y descensos pronunciadas. La llegada de esta línea fue tan importante ya que permitió que las personas pudieran ahorrarse un viaje de alrededor de 14 horas, tiempo que generalmente se tardaban en un traslado de carros de caballos y trineos años antes de la Línea Albula en 1904.
Suiza es un país caracterizado por sus áreas montañosas y harían pensar que no es el mejor lugar para las líneas ferrocarrileras, pero no es así. Es que la población suiza es una de las más dependientes de este tipo de transporte con una media de viaje de 2.450 kilómetros al año y siendo un país pionero de las innovaciones de ingeniería, teniendo como ejemplo el Túnel de Base de Gotardo, siendo el túnel ferroviario más largo y profundo en el mundo, inaugurado en 2016 en Suiza.
Es tanta la importancia de los medios de transporte público para la población suiza que miles de usuarios dependen de ellas para su viaje a través de tranvías, trenes y autobuses para atravesar las cuidades más importantes del país.
Como dato, en 2021 Ferrocarriles Federales Suizos (SBB) transportó 880.000 pasajeros y 185.000 toneladas de mercancía en un día a partir de 11.260 trenes en operación sin contar los más de 70 ferrocarriles “privados” que viajan por las vías estrechas y estándar.
Una estrategia clave en la economía
A diferencia de otras potencias europeas, Suiza tiene un papel dominante dentro de la economía gran parte beneficiada por sus líneas de transporte en tren. Por muchos siglos, existió una barrera para los viajeros y el comercio, pero a años actuales Suiza ha invertido millones de francos en la expansión de largos túneles por todo su territorio como por el ejemplo el túnel de base de San Gotardo y Loetshberg.
En materia de gestionamiento y mejoras, el Consejo Federal Suizo ha realizado consultas para las inversiones a largo plazo dentro de los programas ferroviarios. Entre los beneficios que se busca obtener en años próximos se encuentra el de aumentar el uso anual del transporte público de 26.000 millones de pasajeros-kilómetros a 38.000 millones de pasajeros-kilómetros en 2050.
También se buscaría aumentar las cuotas en los mercados de pasajeros y mercancías, siendo una manera de hacer a los servicios de transporte ferroviario un medio de mayor acceso y movilidad en armonía con otros.