Con esfuerzo y compromiso, Martha Aurelia Jasso Estrada y Edlin Yuritzy Valenzuela Jasso limpian áreas verdes de Culiacán como el parque de la colonia 5 de Febrero
Por: Juan Madrigal
Culiacán, Sinaloa.- Desde muy temprano, cuando el sol apenas asoma sobre la ciudad, Martha Aurelia Jasso Estrada y su hija Edlin Yuritzy Valenzuela Jasso ya están listas para comenzar su jornada.
Entre escobas y sonrisas: la dupla que devuelve vida a los parques de Culiacán
Con escoba en mano y una sonrisa que refleja compromiso, ambas forman parte del equipo de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Culiacán, y desde hace tres años dedican su esfuerzo a mantener limpias las áreas verdes y espacios públicos del municipio.
Su labor, muchas veces silenciosa pero profundamente valiosa, transforma cada rincón que tocan. “Nos gusta ver los parques bonitos, limpios, porque es donde salen a jugar en especial los niños”, expresó Martha mientras llena una bolsa jumbo de basura con la satisfacción del deber cumplido.
Madre e hija fueron las encargadas de dar limpieza a la Unidad Deportiva 5 de Febrero, un espacio donde familias, deportistas y vecinos se reúnen a diario para convivir.
Gracias a su trabajo constante, este lugar volvió a lucir limpio y agradable, demostrando que el amor por la comunidad también se expresa a través del cuidado de lo común.
Para Carolina López, vecina de la colonia 5 de Febrero, el trabajo de Martha y Yuritzy es digno de admiración:
“Ellas hacen una labor muy importante. Pero también depende de nosotros mantener el parque limpio. No es más limpio el que limpia, sino el que no ensucia”, comentó con conciencia cívica.
Entre bolsas de basura, árboles y bancas recién barridas, Martha y Yuritzy representan a tantas personas que día a día embellecen la ciudad con esfuerzo y humildad.
Su trabajo no solo da brillo a los parques, sino también a los valores de respeto, colaboración y responsabilidad compartida.
En cada jornada, madre e hija dejan una lección: cuando se trabaja con dedicación y amor por lo que se hace, incluso una escoba puede ser una herramienta para sembrar orgullo y esperanza en la comunidad.