Fundado en 1633, Cabazán es mucho más que un destino turístico: es una joya cultural que conserva la esencia de los pueblos antiguos de Sinaloa
Por: Yolanda Tenorio
Cabazán, ubicado en San Ignacio, Sinaloa, es un hermoso pueblo de arquitectura colonial, rico en historia cultural, que vale la pena visitar.
Este forma parte de la Ruta de las Misiones, y tiene el único museo dedicado al jaguar en México.
Cabazán, conocido en náhuatl como “lugar de culebras”, es un pequeño y pintoresco pueblo que fue fundado en el año de 1633 por los misioneros jesuitas, las viejas construcciones edificadas de adobe y tejas sostenidas por gruesas vigas de madera, con sus grandes portales y patios, evocan a tiempos pasados.
Descubre Cabazán: el pueblo sinaloense donde el tiempo se detuvo
En este cálido lugar de calles limpias y bien trazadas, se encuentra el museo del jaguar, único en su especie en México, el cual fue creado gracias al impulso de la bióloga y catedrática de la UAS, Yamel Rubio Rocha, en coordinación de pobladores y algunas instituciones, este fue inaugurado en el año 2011, y ha servido para realizar exposiciones e investigaciones relacionadas con esta especie emblemática de San Ignacio.
Los habitantes celebran cada ocho de septiembre, a la Virgen de la Santísima Natividad, con música de banda le son dedicadas las mañanitas y después es paseada por las calles del pueblo, su antiguo templo construido a finales del siglo 18, según algunos historiadores, fue el último en ser construido por los misioneros jesuitas a su paso por San Ignacio, de ahí el dicho se deriva el significado del popular “aquí se acaba el san”.
Las principales actividades económicas de las familias, es la agricultura y ganadería, aunque algunas mujeres se dedican a la elaboración de pan, empanadas y coricos de manera artesanal.
También es común que en temporada de lluvias, en su mayoría hombres, se adentren entre la espesura del monte para recolectar el famoso chile silvestre conocido como chiltepín, el cual comercializan, en salsa, fresco, seco o curtido.
Sus moradores son tranquilos y hospitalarios, sobre todo unidos, y abiertos a recibir a sus visitantes cualquier época del año.
Un viaje a Cabazán: donde la historia, la fe y la naturaleza se encuentran
También puedes encontrar un lugar único para desayunar o comer, platillos típicos de la región, el restaurante La Misión de las Misiones, atendido por sus propietarios Trini y Héctor, y donde los alimentos son acompañados por productos lácteos como queso, jocoque o requesón, que son elaborados en ese mismo lugar.
Sin lugar a dudas este municipio tiene mucho que ofrecer, pues tiene una basta y variada historia cultural que se ha ido heredando por generaciones, y que los pobladores se han propuesto en conservarla, al igual que las tradiciones.
Cabazán se ubica a poco más de ocho kilómetros del entronque de la carretera estatal con la comunidad de El Carmen, que se localiza sobre el kilómetro 15.