Desde un pequeño módulo en la plazuela hasta coordinar una sede consolidada, Ramón va abriendo caminos a quienes buscan concluir la preparatoria en Navolato.
Cuando Ramón Inzunza llegó a la plazuela de Navolato hace once años, no imaginaba que esa cita cambiaría el rumbo de su vida.
Había mandado un mensaje por redes sociales para pedir informes sobre una preparatoria abierta que apenas se estaba instalando en el municipio.
Un mensaje de texto que le cambió la vida
La información no era para él, sino para otra persona que quería estudiar. Sin embargo, ese simple gesto lo conectó con el director del Instituto de Prepa Abierta Siglo XXI, Arturo Ruiz, quien le lanzó una pregunta inesperada:
—“¿No conoce a alguien que quiera trabajar con nosotros?”.
Ramón, que en ese entonces estaba desempleado, no dudó en ser sincero:
—“No sé quién pudiera, pero yo no tengo trabajo”.
Un inicio humilde, un resultado exponencial
Ese día, sentado en una banca de la plazuela Vicente Guerrero, lo entrevistaron y lo invitaron a sumarse al proyecto. No había oficinas, ni salones, ni mobiliario. Solo un módulo de información en la calle. Con eso, y mucha fe, inició la aventura.
“Yo llegué desde cero, y ahora me toca coordinar toda la sede de Navolato. Es una gran satisfacción porque me dieron la confianza y nunca dudé que todo iba a estar bien”, comparte Ramón, quien hoy funge como coordinador administrativo, encargado del control escolar y de la publicidad.
Lo que empezó con un pequeño módulo frente al Ayuntamiento se convirtió en una institución reconocida y con sede propia.
Al principio, Ramón se apoyaba en un espacio prestado dentro del mismo Ayuntamiento para atender a los alumnos e inscribirlos. Poco a poco, el Instituto ganó confianza en la comunidad.
“Recuerdo que al inicio éramos 20 o 30 alumnos, después 60, hasta superar los 100 en un ciclo. Hoy ya llevamos 11 generaciones de egresados. Eso me llena de orgullo, porque sé que Siglo XXI en Navolato existe gracias a todo el esfuerzo que hemos hecho”.
Dónde encontrar a Siglo XXI en Navolato
Actualmente, la sede de la Prepa Abierta Siglo XXI en Navolato se encuentra en la calle Morelos #139, entre Miguel Hidalgo y Macario Gaxiola. Y aunque el crecimiento ha sido notorio, el espíritu sigue siendo el mismo: apoyar a todas las personas que quieren superarse.
En estos once años, Ramón ha visto pasar todo tipo de alumnos: jóvenes que dejaron la escuela, trabajadores del campo, migrantes, amas de casa y hasta personas de más de 60 años.
“Me ha tocado atender gente que llega sin ilusiones, pensando que ya no tienen oportunidad. Pero aquí encuentran apoyo, terminan su prepa y muchos siguen a la universidad. He visto cómo les cambia la vida”, dice con emoción.
Historias de superación que cambian vidas
Una de esas historias es la de José, trabajador agrícola que llevaba años en el mismo puesto porque no tenía certificado de estudios. Cuando terminó su preparatoria en Siglo XXI, la empresa lo ascendió.
“Ese día me agradeció porque dijo que no solo cambió su trabajo, sino también la manera en que lo veían sus hijos”, recuerda Ramón.
Casos como ese se repiten en cada generación. Son el motor que lo mantiene firme en su misión.
Aunque Ramón es originario de El Bledal, Navolato lo acogió desde niño cuando su familia se mudó por motivos de trabajo agrícola. Aquí creció, aquí estudió la preparatoria y aquí encontró su vocación.
Con la camiseta bien puesta
“Yo siento que esta prepa es mía, aunque me digan que no. La quiero porque he estado desde el principio y porque sé que ayuda a las personas a cumplir sus sueños. Aquí las puertas están abiertas para todos”, asegura.
Ese compromiso se refleja en cada detalle: desde la atención personalizada hasta la tranquilidad que brinda el saber que los certificados de la Prepa Abierta Siglo XXI son oficiales y permiten ingresar a cualquier universidad.
Para Ramón, su labor en Siglo XXI no es solo un empleo. Es parte de su vida y de sus sueños.
“Disfruto mucho lo que hago, no lo veo como trabajo. Y a futuro me gustaría estudiar Derecho, una carrera noble que me permita seguir ayudando a la gente”, confiesa para Tus Buenas Noticias.
La educación abre puertas a un mejor futuro
Su camino no ha sido fácil, pero lo ha llenado de satisfacciones. “Yo empecé vendiendo ropa, accesorios, perfumes, buscando la manera de salir adelante. Pero aquí encontré un lugar en el que puedo servir y crecer”.
Hoy, después de once años, Ramón tiene claro su mensaje: la educación abre puertas y nunca es tarde para intentarlo.
“Si alguien quiere terminar la prepa, que se anime. Aquí los vamos a recibir con gusto y vamos a ayudarles a cumplir sus metas. Hemos visto que sí se puede y que estudiar transforma vidas”, asegura.
El Instituto de Prepa Abierta Siglo XXI en Navolato sigue firme en su misión de brindar oportunidades. Y como bien lo resume Ramón:
“Aquí llegan personas con dudas, con miedos, pero salen con un título en las manos y un futuro lleno de posibilidades”.
Porque en la Prepa Abierta Siglo XXI, siempre hay un nuevo comienzo para quienes deciden dar el paso.