Vecinos organizan torneo de voleibol en Las Glorias para fortalecer el tejido social y mejorar un parque
Por: Francisco Castro
Con gran entusiasmo y espíritu deportivo, se celebró el Torneo de Barrios de Voleibol en el Parque Las Glorias Tamarindo, una iniciativa comunitaria organizada por el Comité Vecinal del Fraccionamiento Las Glorias, encabezado por la Dra. María de Jesús Lugo Elizalde, en coordinación con Parques Alegres IAP, representada por Marcos Domínguez.
El evento reunió a ocho equipos de jóvenes de colonias como Los Ángeles, Zona Dorada, Albaterra y Las Glorias, quienes disfrutaron de una jornada vibrante, cargada de compañerismo, esfuerzo y ganas de mejorar su entorno.
El equipo Aran FC, originario del fraccionamiento Los Ángeles, obtuvo el primer lugar, repitiendo el triunfo conseguido semanas antes en el torneo del Parque Valle del Agua, donde también se alzaron como campeones. En segundo lugar, quedó el equipo Zona y en tercer sitio la Máquina.
Un evento deportivo que fortalece el tejido social
Para la Dra. Lugo, este tipo de torneos representan más que una competencia: son una herramienta para formar juventudes y fortalecer el tejido social.
“Me parece un evento muy acertado. Es importante promover el deporte, sobre todo entre los jóvenes, como alternativa frente a la violencia. Ojalá más autoridades se sumen y apoyen estos espacios”, expresó.
La presidenta del comité vecinal también hizo un llamado urgente a las autoridades municipales para invertir en el parque, que actualmente funciona con mínimos recursos gracias a las gestiones y donativos de los vecinos.
Un esfuerzo comunitario
“Las bancas, los juegos, las porterías, todo ha sido conseguido por rifas o donaciones. Necesitamos agua para los árboles, iluminación y más infraestructura”, enfatizó Lugo, quien lleva más de diez años trabajando por los parques del sector y se coordina con Elizabeth Bernal, del comité del Parque Las Glorias Girasoles, ubicado en el mismo sector.
Eventos como este torneo de voleibol fortalecen el espíritu deportivo y son una muestra clara del poder de la organización vecinal para transformar espacios públicos y sembrar esperanza en las nuevas generaciones.