Vecinos de la colonia Primavera ya cuentan con un estadio digno y bien iluminado para entrenar, competir y convivir en comunidad. El espacio fue rehabilitado tras años de abandono.
Después de años en el olvido, el Estadio Juventud de Navolato vuelve a brillar. Literalmente.
Las nuevas luminarias, el césped renovado y las butacas recién instaladas son parte de una rehabilitación que responde al llamado de la ciudadanía y que devuelve a los deportistas y familias de la colonia Primavera un espacio digno para entrenar y convivir.
La rehabilitación del estadio
La rehabilitación incluyó la instalación de 48 lámparas LED tipo proyector de 500 watts, reparación de las torres con pintura especializada, sistema eléctrico nuevo con centros de carga, registros, cableado y hasta un contacto trifásico para facilitar el uso de equipo especializado.
También se colocó un sistema de riego para mantener el pasto en óptimas condiciones.
A esto se suman otras mejoras que le dan vida al recinto: se pintó la techumbre de las gradas, se cambiaron butacas deterioradas por nuevas, se pintaron las que aún eran funcionales y se hicieron adecuaciones en general para su uso deportivo.
El encendido de las luminarias
Durante la entrega oficial, se realizó un encendido simbólico de las luminarias y el alcalde Jorge Rosario Bojórquez, entregó el acta de recepción de la obra al Comité de Participación Social, integrado por vecinos y deportistas que desde hace tiempo habían solicitado que el estadio fuera atendido.
“Antes daba tristeza verlo”, compartió uno de los entrenadores locales, “pero ahora sí da gusto venir a entrenar. Es otro ambiente, y eso motiva también a los muchachos”.
La rehabilitación no solo es una mejora en infraestructura, sino una señal de que cuando la ciudadanía se organiza y alza la voz, es posible transformar su entorno. El espacio ya es utilizado por jóvenes atletas de distintas disciplinas, quienes antes batallaban con la falta de luz, infraestructura y seguridad.
Un renovado espacio deportivo
El estadio, que ahora representa un punto de encuentro para la comunidad, también es un recordatorio de lo que se puede lograr cuando el trabajo colectivo y la escucha ciudadana se convierten en prioridad para la autoridad municipal.
Como parte de los próximos pasos, se anunció que se buscará la pavimentación del estacionamiento, una petición pendiente que ya forma parte de la agenda comunitaria.
“Ya tenemos un estadio en forma, lo que falta es que le den seguimiento y que todos lo cuidemos”, expresó Luis Enrique Pérez, presidente del Comité de Participación Social.
En una comunidad donde el deporte es parte de la identidad, este tipo de acciones no solo mejoran un espacio físico, también siembran esperanza y construyen comunidad.
Porque en Navolato, cuando el estadio se llena de luz, también se enciende el ánimo de seguir adelante.