El trabajo del futuro: 6 pasos para mejorar el home office

Una cultura centrada en las personas dota de flexibilidad y confianza a los empleados para una mayor productividad

Antes de la pandemia por coronavirus, teletrabajar era un ‘lujo’ para unas pocas personas. Y con la llegada de ese virus, esta dinámica ayudó a mantener los trabajos de millones de individuos alrededor del mundo, de golpe y sin estar preparados. Por lo que, dentro de esta rutina, es posible mejorar el home office para evitar estrés o ansiedad en casa por cuestiones laborales.

“2020 sorpréndeme” fue una frase que cobró vida con la llegada del Covid-19, y que ocasionó que gran parte de la sociedad comenzara a trabajar desde casa a fin de evitar la propagación del virus.

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Podría parecer fácil pero hacer teletrabajo requiere tener un espacio específico para evitar interrupciones. ¿Y cómo hacerlo si no se tenía prevista una pandemia? Para mejorar el home office, Enrique Dans en Forbes invita a implementar los cinco niveles de autonomía de trabajo distribuido por Matt Mullenweg, creador de WordPress.

De la noche a la mañana, los trabajadores pasaron de hacer sus labores sólo en la empresa, a convertir su sala, cocina o cuarto, en su oficina. Antes de la pandemia, era común situarse en el nivel cero de autonomía (el trabajo no se puede hacer a menos que esté físicamente allí).

¿Te parece familiar el nivel cero? Podría ser que tu empresa, antes de la pandemia, poco a poco pusiera la herramienta del teletrabajo sobre la mesa. Sin embargo, si es el caso, es probable que fuera una sorpresa tener que laborar desde casa de un día para otro. A este se le conoce como el primer nivel de autonomía.

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De repente llegó el coronavirus a nuestras vidas y a una gran cantidad de trabajadores los subió al nivel dos de autonomía: trabajar desde casa y mantener la productividad. La oleada de videoconferencias por Zoom o Google Meet para recrear el tipo de contacto que ocurre en una oficina llegó, y consigo nuevas interrupciones como que los hijos se asomaron durante una junta.

En este nivel puede esperarse el final de la cultura del presentismo y la microgestión. Checar a los trabajadores queda en el pasado y enfocar un cambio de cultura basado en la confianza y el empoderamiento es el siguiente paso para el logro de objetivos a distancia.

De ahí el ‘tren de los Godínez’ busca llegar a la estación “remoto o distribuido”, tercer nivel, para adquirir mejores equipos para seguir trabajando de forma remota hasta nuevo aviso, o si lo prefieres, incluso seguir haciendo home office cuando el aislamiento concluya, e ir a la oficina solo si lo consideras necesario.

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Y lo anterior, ¿a qué te suena familiar? Precisamente, a la esperada ‘nueva normalidad’. “Cualquier compañía que pueda permitir que su gente sea completamente efectiva de una manera distribuida, puede y debe hacerlo mucho más allá de que esta crisis actual haya pasado”, señala Matt Mullenweg.

Es así como inicia el proceso de adaptación a la nueva forma de trabajo basada en la fortaleza del trabajo remoto pero sin que éste sea obligatorio ya que puede perderse el sentimiento de pertenencia organizacional. Por lo que el rediseño de las oficinas será clave para mantener la cultura en estos lugares.

Enseguida se acercan los niveles 4 y 5, caracterizados por la optimización de las prácticas de trabajo: menos rondas de videoconferencias y más videos cortos grabados para su posterior visualización, junto con menos tiempo sentado frente a una pantalla escuchando a otras personas.

De ahí que las herramientas como Google Docs y Office 360 toman el protagonismo al permitir la corrección de información simultánea por parte de los empleados.

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Llegados a este punto, no sólo se puede ahorrar tiempo de traslado a la oficina, se puede organizar el lugar de trabajo en casa y fomentar la creatividad. Por tanto, la ‘empresa distribuida’ atraerá mejores talentos al eliminar las barreras geográficas.

El futuro laboral será así. Con un home office más eficiente que dote de flexibilidad y confianza a los trabajadores en el cumplimiento de sus actividades sin hostigamientos. Y aquel que se adapte mejor al entorno, será el ganador.