Una historia que muestra la verdadera fortaleza del carácter que va más allá de los antecedentes de la persona, pues con decisión y firmeza todos somos capaces de lograr todos nuestros sueños y salir adelante.
Por: Tus Buenas Noticias
Una historia que revela la verdadera fortaleza de carácter.
Cargando con sobredosis de heroína y durmiendo a la intemperie en las calles de Los Ángeles, California. Un joven de 33 años pasó del fracaso y la desesperación, al éxito.
Khalil Rafati es una persona que fue adicto a la pasta base de cocaína o mejor conocida como "crack".
A sus 33 años pesaba tan sólo 49 kilogramos y su piel se encontraba cubierta de úlceras. En este momento se dio cuenta que era tiempo de cambiar el rumbo de su vida.
Khalil intentó dejar las drogas y fracasó. Sin embargo nunca abandonó esta idea y en su novena sobredosis, buscó ayuda.
Pues con ella se dio cuenta que tenía que cambiar para poder seguir con vida, por tal motivo decidió pasar 4 meses de su vida en un centro de rehabilitación en 2003
Debido a las atenciones recibidas por el centro de rehabilitación desde entonces no ha vuelto a recaer, ha permanecido libre del consumo de drogas.
Lo impactante de la decisión tomada por Khalil es el éxito obtenido al rehacer su vida.
Después de superar la drogadicción, se mantuvo ocupado en varios trabajos y tuvo participación en dos centros de rehabilitación en Malibú.
También lavó autos, sacó perros a caminar y realizó trabajos de jardinería con lo que pudo ahorrar dinero.
"Trabajé arduamente, siete días a la semana, 16 horas al día", expresó.
Probablemente has escuchado sobre la organización Sunlife Organics, en efecto, este joven en su fundador y propietario.
Sunlife Organics es una empresa de alimentos saludables reconocida en California con ventas anuales por más de 6 millones de dólares.
Actualmente la compañía cuenta con 6 sucursales y está en vísperas de expansión hacia 16 estados de EUA y a Japón.
Esta empresa dio sus primeros pasos cuando Khalil arrendó una casa y abrió su propio centro de rehabilitación, Riviera Recovery.
Durante su estadía los residentes recibían una mezcla de jugos exóticos que con el tiempo, su reputación era conocida por más personas.
Cada vez eran más personas que llamaban para comprar estas bebidas y al darse cuenta de la demanda existente, estableció Sunlife Organics en 2011.
Hoy en día la empresa tiene una fuerza laboral de más de 200 personas y además de jugos, vende una gama de alimentos y ropa, como playeras y encapuchados.
Un poco más sobre Khalil Rafati.
Nacido en Ohio en el centro de EUA, Khalil es hijo de una madre de procedencia judía-polaca y de un padre musulmán.
Al tener una niñez dura, abandonó sus estudios y fue arrestado por vandalismo y robo.
Con el sueño de convertirse en una estrella de cine, Khalil abandonó su hogar y se mudó a Los Ángeles a sus 21 años.
Este sueño no despegó entonces su alternativa fue tocar en conjuntos musicales locales, a su vez obtenía ingresos lavando los autos de celebridades como Elizabeth Taylor, Jeff Bridges y Slash.
Por su falta de interés en el cuidado de su salud, cayó en el mundo de las drogas y su vida cambió drasticamente.
De soñar con la actuación en Hollywood pasó a ser vendedor de drogas sólo para costearse su propia adicción.
Ante esta historia el analista de Deutsche Bank en Nueva York Rob Nazara, menciona lo siguiente:
"No importa los antecedentes educacionales o profesionales que se tenga, el éxito de un empresario está impulsado por temple, determinación y ambición".